Secciones
Servicios
Destacamos
Tras las evaluaciones de invierno de la Comisión Europea y de otras entidades, ya se pueden extraer dos conclusiones, que afectan al presupuesto nacional y también al de Cantabria. En primer lugar, las estimaciones de crecimiento económico de 2021 y 2022 son ahora bastante inferiores ... a las que el Gobierno central (y obedientemente el cántabro) se aferró para justificar sus planes de ingresos y gastos. Las leyes presupuestarias infravaloran los problemas de crecimiento y empleo que hogares y empresas van a encontrar. Por tanto, se debería rediseñar el gasto en dirección a un mayor impulso de la vida productiva. Desde luego, hacer una quiniela a medias con nuestro Ministerio/Consejería de Economía parece dudosa inversión.
En segundo lugar, al consolidarse una alta inflación, se produce lo que algunos habíamos avisado: que el aumento nominal de los presupuestos se puede traducir, en realidad, en congelación o incluso disminución del gasto público. Ya el nuevo presidente de los constructores de Cantabria ha advertido de que hay licitaciones de hasta dos millones de euros que están quedando desiertas. Con alto IPC, no solo los hogares pueden comprar menos cosas, sino también los gobiernos. Pero en recuperación necesitaríamos impulso de gasto real, es decir, por encima de la inflación. Y podemos hacerlo porque en 2022 no hay ningún techo de déficit ni deuda, que sigue suspendido. Podemos gastar lo que nos parezca juicioso y el gobernante que no lo haga es por inconsciencia, ineficacia o incluso incoherencia, si se trata de aquella parte de la clase política que se lamentaba de los «recortes» con «quejíos» de tablao flamenco.
Ahora hay toda la tela que queramos poner: ¿pondremos incluso menos que el año anterior? Todo parece indicar que así será. La Administración quiere fingir eficacia con adjudicaciones a la baja y que el empresario y sus empleados se coman el alto riesgo de una situación volátil. Así la economía real tiene dos adversarios: la coyuntura económica y la estructura mental oficial. Pronto tendrá otro más: la subida de tipos de interés para refrenar los precios, que enfriará la economía. Estamos aún en febrero, así que ¿alguien hará algo?
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.