'Blade Runner 2', un casting a la altura del reto

Robin Wright y Dave Bautista son las dos últimas incorporaciones confirmadas a un proyecto que lleva años dando de qué hablar. En realidad casi desde que la cinta basada en la novela de Philip K. Dick '¿Sueñan los androides con ovejas eléctricas?' (1968) aterrizase en la cartelera allá por 1982, legiones de cinéfilos anhelaban una secuela que volviese a sumergirles en ese universo en el que los terrícolas se mezclan con robots de apariencia prácticamente humana que sirven como esclavos en las colonias exteriores de la Tierra. Son los llamados replicantes, androides creados por la Tyrell Corporation valiéndose de los últimos avances en ingeniería genética que acaban revelándose contra sus amos y transformándose en una poderosa amenaza para su existencia. El futuro queda entonces en manos de un antiguo policía, ese Blade Runner con el rostro de Harrison Ford cuya misión se ve más dificultada con la entrada en acción de una replicante llamada Rachael (Sean Young) de la que acaba enamorándose.

El filme pivotaba sobre la cuestión de si la tecnología podía acabar volviéndose contra el hombre, asunto recurrente en la historia cinematográfica que el director de 'Alien, el octavo pasajero' (1979) planteaba con una maestría superior a lo que hasta entonces se había visto, mezclándola con elementos más propios de la novela negra, y que hoy, tres décadas después, sigue deparando opiniones de todo tipo. El sugerente argumento, la estética retrofuturista, las formidables actuaciones tanto de Ford como de Sean Young y Rutger Hauer (Roy Batty) y la no menos excepcional música de Vangelis no fueron suficientes para convencer al público. Los resultados de taquilla devinieron en decepcionantes, alimentando la opinión de unos productores que nunca comprendieron la obra de Scott y que le pusieron mil y un problemas durante el rodaje. Pero el paso del tiempo, como a los buenos vinos, le sentó a las mil maravillas. Se convirtió en un título de culto sobre el que reflexionarían intelectuales y fans con una asiduidad propia tan solo de las dos grandes franquicias del género: 'Star Wars' y 'Star Trek'.

Nube de misterio

Durante años, la posibilidad de una secuela no fue más que un anhelo. Hasta que en 2012 Ridley Scott comenzó a hablar con el guionista Hampton Fancher, autor del libreto de 'Blade Runner'. La cosa iba en serio. Recién completado el rodaje de 'Prometheus', una suerte de precuela de ese 'Alien' que puso su nombre en el mapa, el realizador británico impulsaba la continuación de la cinta que certificó su condición de maestro de la ciencia ficción. Poco más se supo entonces, salvo que la trama se situaría algunas décadas después de ese Los Ángeles futurista del año 2019. Se dijo también que Deckard vería reducido su protagonismo en favor de otro personaje. Pero Scott siempre tuvo claro que la secuela de 'Blade Runner' precisaba del concurso de Harrison Ford. Y a finales de febrero de 2015 se confirmaba que el actor había aceptado la propuesta.

Alcon Entertainment, la compañía que se encuentra tras el filme, anunciaba asimismo el nombre de Denis Villeneuve como director del largometraje. Tras sorprender con 'Incendies' (2010), filme nominado al Oscar en la categoría de mejor película extranjera de habla no inglesa sobre dos hermanos gemelos que viajan a Oriente Medio en busca de una familia cuya existencia ignoraban, y confirmar sus buenas artes en taquilla con la desasosegante 'Prisioneros' (2013), el canadiense era el escogido para relevar a Ridley Scott, quien habría de tutelarle en calidad de productor. A Hampton Fancher se le sumaba Michael Green para dar forma al guión, repitiendo así este último una labor que también ejecuta en otro proyecto con el sello Scott: 'Alien: Covenant'.

Quedaba, por tanto, completar el reparto, tarea que los productores están realizando en las últimas semanas y que va deparando gratas sorpresas. El primer nombre que se desgranó, aparte del de Harrison Ford, fue el de Ryan Gosling. Canadiense como Villeneuve, siempre le ha acompañado el marchamo de calidad, adornado con un cierto halo irredento que le ha apeado de algún que otro proyecto. 'El diario de Noa' (Nick Cassavetes, 2004) apuntó sus maneras de galán, pero fue 'Half Nelson' (Ryan Fleck, 2006) la cinta que le consagró y le dio la hasta ahora única nominación al Oscar que atesora. 'Drive' (Nicolas Winding Refn, 2011), 'Los idus de marzo' (George Clooney, 2011) y 'La gran apuesta' (Adam McKay, 2015) son otros títulos clave en la filmografía de un actor sobre cuyos hombros descansará buena parte del peso de 'Blade Runner 2'. Aunque eso es apenas lo único que ha trascendido, pues su rol sigue envuelto en el misterio.

La otra gran incorporación al proyecto es la de Robin Wright. Tres décadas después de convertirse en el amor platónico de miles de espectadores merced a su actuación en 'La princesa prometida' (Rob Reiner, 1987), la texana atraviesa un excelente momento profesional. Su papel de primera dama en 'House of cards' la ha convertido en una de las grandes estrellas del boom seriéfilo. La producción de Netflix le ha permitido explorar además una nueva faceta, la de la dirección, y le ha valido tres candidaturas a los Globos de Oro, una de ellas trocada en galardón. Vista recientemente en 'Everest' (Baltasar Kormákur, 2015), rueda actualmente 'Wonder Woman', el filme de Patty Jenkins en el que la israelí Gal Gadot pone rostro a la princesa Diana de Themysira. Como en el caso de Ryan Gosling, su personaje en 'Blade Runner 2' sigue envuelto en el misterio, ya que Ridley Scott apenas ha dado algunas pistas sobre la escena inicial y ha dicho que se asemejará a 'Las uvas de la ira' (1940), el clásico de John Ford basado en la novela de John Steinbeck ambientada en la Gran Depresión solo que situada a mediados del siglo XXI. Pero el talento puesto de manifiesto por la actriz en cada una de sus actuaciones no hace sino cimentar la solidez del filme que prepara Denis Villeneuve.

En él estará también Dave Bautista, último fichaje confirmado hasta el momento. Antiguo luchador profesional reconvertido a actor, sus formidables músculos le han permitido lucirse en un puñado de películas en las que la acción es el ingrediente predominante, desde 'El hombre de los puños de hierro' (RZA, 2012) hasta 'Spectre' (Sam Mendes, 2015), título este en el que se las tenía con James Bond. Cuenta además con experiencia en el terreno de la ciencia ficción, género en el que ha realizado sus dos incursiones cinematográficas más conocidas: 'Riddick' (David Twohy, 2013) y 'Guardianes de la galaxia' (James Gunn, 2014). "Estoy muy emocionado con este proyecto", confesaba en el mensaje publicado en Twitter en el que daba cuenta de su adscripción a la secuela de 'Blade Runner'.

A buen seguro que en los próximos días iremos conociendo más novedades en torno a una cinta cuyo rodaje comenzará en julio y que tiene previsto su desembarco en la cartelera para el 12 de enero de 2018. ¿Se despejará entonces para siempre la duda de si Rick Deckard es o no un replicante? Ridley Scott ya lo ha dejado claro en más de una ocasión pero la cuestión siempre vuelve. ¿También tras 'Blade Runner 2'?