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La moción de censura planteada el pasado viernes en Arredondo por tres concejales socialistas (los tres independientes) y el edil no adscrito (ex PRC) para destituir al alcalde, Leoncio Carrascal (PRC), no ha prosperado finalmente tras certificar la secretaria municipal que la propuesta «no reúne ... los requisitos exigidos», ya que uno de los proponentes «ha formado parte del grupo político municipal al que pertenece el alcalde». Se refiere al concejal Francisco Villegas, que se desmarcó en varios plenos de las votaciones de su grupo, lo que motivó su expulsión del partido, que ahora le considera «tránsfuga».
La última reforma de la Ley del Régimen Electoral General contempla una disposición encaminada a «limitar el alcance de las acciones que los políticos tránsfugas podían llevar a cabo», según explicó el Partido Regionalista en un comunicado. Dicho artículo establece que si uno de los proponentes de la moción de censura presentada «forma o ha formado parte del grupo político municipal al que pertenece el alcalde cuya censura se propone, se precisa estar suscrita por la mayoría absoluta incrementada en el número de un concejal». Es decir, en el caso de Arredondo, el escrito de censura debería estar firmado por cinco concejales y no por cuatro.
Es por ello que el PRC volvió a solicitar ayer al PSOE que expulse a sus concejales de Arredondo «por poner en peligro la gobernabilidad del municipio, al anteponer sus intereses personales a los de los vecinos». Sin embargo, ninguno de los tres concejales ligados a la lista socialista son afiliados del PSOE. El concejal, Alejandro Manteca, aclaró ayer que tanto él como la edil Silvia González, «estamos adscritos a la lista, pero no somos miembros del PSOE». Evaristo Canales, que sí era miembro del partido, cursó su baja en septiembre con motivo de la inclusión del lobo en el Listado de Especies Silvestres en Régimen de Protección Especial (Lespre). Canales no dejó, sin embargo, su acta de concejal y de hecho, colabora estrechamente con los dos concejales de la lista socialista como grupo municipal unificado, actuando en muchas ocasiones como portavoz.
Para Canales, que se postulaba como alcalde independiente en caso de que se hubiera debatido la moción, «esta ley lo que hace es proteger al que lo hace mal porque de una corporación de siete personas necesitas prácticamente un 80%, entonces es imposible realizar una moción de censura, que es algo democrático y legítimo». Además, reprochó que «nadie habla de los motivos de la moción», en referencia a que los regionalistas en sendos comunicados comparan la situación de Arredondo con la de Guriezo, al tiempo que defendió que «nosotros no creemos que Villegas sea tránsfuga».
Entre las motivaciones de la moción, se citaba la situación económica del Ayuntamiento y la posibilidad de que éste quedase forzosamente adherido al Fondo de Financiación a Entidades Locales por el impago de facturas pendientes y a un nuevo plan de ajuste, cuestión que quedó resuelta el pasado viernes con la aprobación de un reconocimiento extrajudicial de crédito. Asimismo, los promotores de la moción de censura advertían en su escrito del incumplimiento de acuerdos plenarios, dejación de funciones o mala gestión, si bien lo más sangrante para los cuatro ediles es, sin duda, la denuncia interpuesta por el regidor contra su propio Ayuntamiento por el acuerdo plenario en el que se acordó la rebaja de su salario.
Para Alejandro Manteca, la situación del Ayuntamiento queda ahora en un estado de bloqueo, ya que tal como recordó, el equipo de gobierno no ostenta la mayoría tras la salida de Villegas. Políticamente considera «bastante injusto» que no haya prosperado la moción. «Entiendo que la ley quiera regular lo que quiera regular, pero Arredondo no es el caso, o así lo entendemos nosotros, y genera una situación un poco rara y bloqueante, difícil de gestionar». Manteca habló, en este sentido, de la negativa del alcalde a negociar los asuntos municipales con los concejales de la oposición en su situación de minoría municipal.
Precisamente, el primer teniente de alcalde, Luis Santander, que ejerce actualmente el cargo de alcalde en funciones con motivo de la baja médica de Leoncio Carrascal, recalcó su «sorpresa inicial» con la presentación de la moción de censura, al haberse abstenido los concejales en la votación del reconocimiento de las facturas pendientes de pago y haber llegado a otro acuerdo relativo a la solicitud de la subvención llamada de Corporaciones Locales . «Creo que los actos los tenían muy marcados, pidiendo primero la dimisión a través de la mal llamada asociación vecinal».
«Yo llevo en el Ayuntamiento desde 2003 y nunca había visto una oposición en Arredondo de este calibre, porque son de no a todo y todo está mal, y sin embargo no vemos propuestas que vayan en positivo», reprochó el teniente de alcalde.
El «gran perjudicado» de esta situación, según Santander, «es el vecino», y aseguró que «están tratando de alimentar una gran mentira» en cuanto a que «Arredondo se está quedando atrás en lo referente a obras, o que hay una presión fiscal escandalosa». Sin embargo, se mostró partidario a consensuar los asuntos municipales con los concejales «que no sean tránsfugas» y «con la oposición legalmente salida de las urnas».
En cuanto a la reunión de la Ejecutiva del PSOE para valorar con los concejales de su lista la crisis política que estaba prevista para ayer, lunes, finalmente tendrá lugar hoy, según ha podido saber este periódico.
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