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En los primeros seis meses de 2023, el para entonces alcalde de Ampuero y actual secretario de Organización y portavoz municipal del PSOE, Víctor Gutierrez, no pudo disfrutar diez días de vacaciones por «el ritmo y volumen de trabajo en el Ayuntamiento al final de ... la legislatura», explica él mismo. Por ello, reclama ahora al Consistorio de la localidad el cobro de dichas jornadas de descanso no aprovechadas, que se traducen en «unos 1.000 euros». De esta manera, Gutiérrez sigue los pasos de su compañera de partido y exalcaldesa de Laredo, Charo Losa, quien también ha solicitado al Consistorio pejino el ingreso de 1.880 euros por 14 días de vacaciones no disfrutadas.
Por su parte, el portavoz ampuerense declara que «no hay sindicatos detrás de las demandas» y apoya a Losa apelando a la Ley de Protección de Datos que «se están saltando a la torera». «En el caso de Charo se han utilizado medios del Ayuntamiento de Laredo para compartir información sensible», matiza Gutiérrez, a lo que añade que «el registro del Consistorio de Ampuero tampoco es seguro».
La demanda, que según sostiene el edil, «no está aún admitida a trámite por el juzgado», se acoge al convenio colectivo de los funcionarios públicos de la Administración local ya que, tal y como detalla, su cargo como regidor, al igual que ocurre con la vigente alcaldesa popular Amaya Fernández, se rigió en todo momento por el citado convenio.
Asegura el alcalde que «otros trabajadores municipales liberados tuvieron problemas en anteriores legislaturas al no estar acogidos al citado convenio». Motivo, alega, por el que la Secretaría de Intervención corrigió el error, con el fin de que todos los empleados del Ayuntamiento gozaran de los mismos derechos». En este sentido, apunta que en su contrato como alcalde está especificado que durante el ejercicio del cargo estuvo asociado al convenio de los funcionarios públicos y es por este motivo que efectúa la reclamación.
«Entiendo que pueda ser noticia, pero es una demanda como la de cualquier otro trabajador. Generamos dos días de vacaciones por mes y nos corresponde cobrar las que no disfrutemos», alega, y justifica su derecho al reconocer que, como trabajador, también percibió la subida del 0,5% de su sueldo con efecto retroactivo. «Ahora es el juzgado el que tiene que admitir la reclamación a trámite o no», zanja Gutiérrez. Lo mismo que su predecesora.
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