El joven que recibió la brutal paliza en Reocín continúa su recuperación en casa

Mientras la Guardia Civil continúa investigando lo ocurrido a la espera de que se produzcan detenciones o identificaciones, los vecinos del municipio reclaman más seguridad y señalan que los fines de semana la zona de la Casa de la Juventud, en La Veguilla, donde se desencadenó el suceso, es un foco frecuente de conflictos y que, además, «se llena de personas haciendo botellón desde por la mañana».

La víctima se encontraba con su novia en las nuevas pistas de skate en el entorno de la Casa de la Juventud cuando, según explicaron sus familiares, fue increpado por los agresores. La pareja decidió marcharse hacia Puente San Miguel, pero el grupo que presuntamente le propinó la paliza, que según testigos había llegado caminando desde Torrelavega, les siguió y se ensañaron con él. Primero uno le pegó por la espalda y, una vez en el suelo, se sumaron sus acompañantes. A la espera de novedades en la investigación policial, desde Delegación del Gobierno prefieren no hacer valoraciones.

El alcalde, Pablo Diestro, ha explicado que estos días se ha procedido a evaluar el horario laboral de la Policía Local -no había efectivos trabajando en el momento de la agresión-, que será reestructurado para que haya agentes de guardia durante los fines de semana. Al mismo tiempo, ha indicado que desde el Consistorio se estudia la posibilidad de instalar cámaras de seguridad en los puntos más problemáticos. En concreto, el regidor explica que se baraja instalar un total de ocho y que tres de ellas tendrían ya destino. Una, en el entorno de la Casa de la Juventud; otra, en la zona de las pistas de pádel, donde se va a instalar una cubierta «y será carne de cañón para los botellones», y una tercera, en el parque del Camarao, en Villapresente. Este último punto también es escenario de diversos actos vandálicos y los vecinos critican la cantidad de basura que se acumula en él, cuando en otro tiempo fue uno de los lugares más emblemáticos del municipio.

En cuanto al futuro del edificio de la Casa de la Juventud, llamada así por una de las utilidades que en su momento se dijo que se le daría, en menos de dos meses se cumplirá un año desde que se anunciase un nuevo uso: la construcción de una guardería municipal. Lo que ocurre es que el Ayuntamiento y el Gobierno regional siguen sin firmar el convenio regulador.

Diestro reconoce la frustración por el retraso, agravada porque no acaba de cuajar ninguno de los proyectos que se han puesto sobre la mesa para el edificio. Tras este suceso, espera que «a lo largo de este mes se pueda firmar el convenio» y asegura que «los trámites están muy avanzados». Una vez firmado, se tendrá que aprobar en el pleno municipal, donde se aprobará la cofinanciación municipal. La inversión municipal y regional anunciada ascendería a 750.000 euros y el proyecto, aprobado en pleno en junio del año pasado, contempla la urbanización exterior y el acondicionamiento interior.

«Queremos dar el servicio de guardería municipal para facilitar la conciliación de las familias del municipio», destacaba en el momento del anuncio el regidor, que consideraba este como «el proyecto más importante del programa electoral» y celebraba que «por fin, después de mucho tiempo, se vaya a poder llevar a cabo». La idea que barajaban desde el Consistorio era que en septiembre del año pasado pudiera estar todo listo para la apertura para ocupar las 45 plazas que tendrá la guardería, a lo que se sumará también la ludoteca municipal.