Los vándalos se ceban con parte de los atractivos turísticos de San Felices

Ha sido el segundo revés que José Antonio Cobo ha recibido en el poco tiempo que lleva de alcalde de San Felices de Buelna. El primero fue la obligada cancelación de la Feria de Ganado. En esta ocasión han sido los vándalos los que han entrado en escena a primera destrozando algunos de los nuevos atractivos turísticos del municipio, las letras corpóreas con el nombre del municipio y la figura de la vaca en la entrada del Ayuntamiento, además de intentar forzar la puerta de acceso a la histórica Torre de Pero Niño.

«Ha sido tremendo desayunar con esta noticia, habituales en otros lugares y ahora extendidas a San Felices». «El pueblo está triste» dijo con la primera estimación de los daños en sus manos, una cantidad que supera los 7.000 euros. «Lo hemos puesto en contacto de la Guardia Civil y se han comenzado las pesquisas pertinentes, a la espera de que den los resultados deseados en la identificación de los autores».

Sobre las dos de la madrugada una vecina oyó golpes y pudo ver a alguno de los asaltantes emprendiendo la huida, tras lo que dio aviso a la Guardia Civil. A partir de ahí, «pondremos todo el empeño en que no se repitan estos actos, por lo que, en contra de lo que nos habría gustado, ya estamos pensando en la instalación de cámaras de seguridad», dijo el alcalde al explicar que junto a las letras se halló una garrafa de aceite, una botella de alcohol y fósforos, «lo que hace pensar que la primera intención fue prender fuego a las letras, pero los vándalos debieron fracasar en ese intento y pasaron a golpearlas con un martillo».

Más difícil será reparar los daños en la cabeza de la vaca colorista estrenada hace apenas unos pocos meses. «Haremos primero un peritaje, hablaremos con el autor y esperemos poder rehabilitar esa figura». Las letras se repondrán y ya se está reparando la puerta de acceso a la torre medieval, explicó.

El alcalde habló de «un triste recorrido que comenzó en las letras, siguió por la vaca y terminó intentando forzar la entrada de la torre no sabemos con qué intención». Todo con material suficiente como para pensar en que el ataque era «premeditado».

El líder de la oposición, Federico Crespo, afirmó que «esto es un atentado contra los vecinos, no es ni contra el gobierno municipal ni contra el Ayuntamiento, es contra los vecinos». Palabras que ratificó ofreciendo al alcalde «nuestro apoyo incondicional». «El pueblo no se puede detener por este tipo de cosas. Que no se desmoralice porque pasa en todas partes. Es lamentable, pero no debe desmotivar al Ayuntamiento, hay que superar estas cosas y seguir caminando», dijo.

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