Un lavado de cara a Santo Toribio antes de la apertura de la Puerta del Perdón

Las actuaciones, tal y como explicó Marcano, «son fruto de un convenio suscrito entre la Fundación Camino Lebaniego y la diócesis». En el caso del monasterio de Santo Toribio, el consejero recordó que «llevaba varios años padeciendo humedades y goteras severas, por lo que las obras han sido costosas y laboriosas en uno de los Bienes de Interés Cultural más importantes de Cantabria».

Habló de las obras y aprovechó para anunciar que a partir de mañana -por hoy- colocarán la oficina del peregrino, iniciarán «la señalización de Cueva Santa y, en unos días, la señalización del resto de las ermitas de los alrededores del monasterio».

Respecto a los albergues del Camino Lebaniego, repasó que cuentan con «tres albergues en licitación -los de San Vicente de la Barquera, Serdio y Lebeña- y otro en obras, el de Cicera». «Por lo que en la actualidad vamos a disponer de doce albergues en el recorrido de los 72 kilómetros del Camino Lebaniego», dijo consciente de que «con motivo del próximo Año Jubilar, se van a acercar a Liébana y a este monasterio miles de peregrinos».

El consejero estuvo acompañado en la inauguración por el obispo de la diócesis de Santander, Manuel Sánchez Monge, quien agradeció a la Consejería «la ayuda para que estas obras tan necesarias estén concluidas». «Hoy es un día de gran alegría porque se acerca un acontecimiento como es el Año Jubilar que tiene una enorme repercusión en todo el mundo».

Con respecto a las obras de las cubiertas del edificio, se han restituido 1.800 metros cuadrados a su estado original, pero actualizando los materiales de cubrición. En cuanto a los baños, que tenían carencias de humedades y condensaciones, se han incorporado tres duchas en cada zona y se ha habilitado una 'ducha-barco' en el aseo adaptado, reubicando el inodoro para permitir su utilización desde ambos costados. También se hanhabilitado sendos anteaseos, con bancos de espera y máquinas expendedoras de productos de aseo, alimento y bebidas en ambos accesos.

Asimismo, se han instalado muebles fijos para vestuario en cada aseo, de tal forma que en el vestuario femenino se han habilitado seis cabinas de inodoro y cinco lavabos, mientras que en el masculino son tres cabinas de inodoro, cuatro lavabos y cinco migitorios. Las obras en los aseos también incluyen la sustitución de las carpinterías exteriores, así como la cubierta del edificio.