Un hombre de 50 años, sexto fallecido en accidente de moto en Cantabria este año

El accidente ocurrió cerca de las dos menos cuarto de la tarde, en la carretera autonómica que une Cabuérniga con Cabezón de la Sal, que se encuentra en buen estado aunque suele ser muy transitada por ser la principal vía de acceso al valle de Cabuérniga.

La Guardia Civil de Tráfico ya investiga qué es lo que pudo suceder a este hombre, padre de dos hijos, para que en una recta aparentemente sin peligrosidad, con buena visibilidad y en un día sin lluvia, perdiera el control de la moto y acabara estrellándose contra una farola.

El fallecido es Óscar Terán, que residía en Colindres con su mujer, localidad a la que se habían trasladado recientemente con la idea de abrir un establecimiento de hostelería. El hombre trabajaba cerca de la zona donde sufrió el accidente mortal.

El Centro de Atención a Emergencias 112 del Gobierno de Cantabria, recibido el aviso del accidente, movilizó hasta el lugar a efectivos de la Guardia Civil de Tráfico y sanitarios del 061, que sólo pudieron certificar la muerte del hombre. La alcaldesa de Cabuérniga, Rosa Fernández, que se personó en el lugar del siniestro, lamentó el fallecimiento.

Cantabria no está al margen de la preocupación de las autoridades por el incremento de accidentes de motocicletas. El dato es clarificador: de las nueve personas que han fallecido este año en las carreteras de Cantabria, seis iban en moto. El propio jefe provincial de Tráfico de Cantabria, José Miguel Tolosa, abogó en una reciente entrevista en El Diario Montañés por buscar soluciones ante la escalada de accidentes: «Los motoristas en la pospandemia han buscado la libertad que da la moto. Hay que hacer algo, la gente está saliendo más y se está matando. Aunque es cierto que las víctimas de este año no lo han sido especialmente por sus imprudencias», señaló.