Santoña da cuenta del permiso para reparar el tejado de Chiloeches y demoler el ala oeste

Junto a estas dos resoluciones, el Consistorio ha recibido un tercer informe de Patrimonio que resuelve denegar la solicitud formulada por el partido Santoñeses de incoación de expediente para declarar Bien de Interés Cultural (BIL) el ala oeste del palacio.

El regidor, junto con su socio de gobierno, Fernando Palacio (PRC), señaló que dichos proyectos se presentarán acompañados de los correspondientes informes de los servicios técnicos municipales «como paso previo a otorgar las licencias de obra» para que la propiedad pueda ejecutar ambas actuaciones.

Abascal defendió que se dará el trámite habitual a estos expedientes que «están debidamente informados por Cultura». Este organismo, sostiene, lo «único que ha hecho es dar cumplimiento en vía administrativa a las sentencias dictadas previamente por el Tribunal Superior de Justicia de Cantabria y ratificadas por el Supremo».

El socialista desmiente rotundamente el comunicado emitido por Santoñeses denunciando que «Cultura autoriza la demolición del anexo sin haber concluido el proceso administrativo de incoación del expediente para la declaración de BIL». El regidor asegura que es «una más de las numerosas patrañas y mentiras» que viene montando Santoñeses en relación a Chiloeches. Abascal aclara que «el servicio de Patrimonio no ha abierto ningún expediente para declararlo BIL al anexo, sino que directamente ha resuelto que no lo es en base a la firmeza de dos sentencias judiciales». Como todo acto administrativo, indica, «es susceptible de recurso, pero no implica que tenga efectos suspensivos». «Se trata de un particular que pide una protección y se le deniega. A todos los efectos, no hay ninguna causa de nulidad, ni de parálisis, ni de carácter suspensivo porque el bien no tiene ahora mismo ningún elemento de protección».

Abascal y Palacio lamentan que desde Santoñeses se quiere seguir con el «circulo vicioso permanente» de recurrir las resoluciones, «con la única intención de seguir sacando rentabilidad electoral porque el edificio no les importa nada». «Están intentando quemar de forma desesperada su ultimo cartucho, cuando deberían estar callados porque han quedado totalmente desenmascaradas en los tribunales sus continuas mentiras».