![Agredida una médico de familia al acudir a un domicilio a atender a un paciente psiquiátrico](https://s1.ppllstatics.com/eldiariomontanes/www/multimedia/202209/15/media/cortadas/stop-agresiones-kMGD--1248x770@Diario%20Montanes.jpg)
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Una brecha en la cabeza (siete puntos), contusiones y un tremendo susto del que ni siquiera quiere hablar. La agresión se produjo la semana pasada. Una médico de Atención Primaria acudió a un domicilio a atender a un paciente psiquiátrico sin saber el episodio violento ... del que iba a ser víctima nada más llegar, que obligó a intervenir a la Policía para reducir al hombre. Desde el Sindicato Médico denuncian que «es responsabilidad del Servicio Cántabro de Salud velar por la seguridad de sus trabajadores». Y consideran que «está claro que algo ha fallado. Estamos hartos de la desprotección. No hay un protocolo de seguridad para acudir a este tipo de avisos en los que puede ser necesaria la contención física, y esto no puede ser».
Desde la Consejería de Sanidad indican que «la Gerencia de Atención Primaria ha estado en contacto con la profesional y se ha ofrecido apoyo y los recursos que pudiera necesitar». Tanto la Administración como el sindicato dejan claro que este caso, en el que hay un problema de salud mental de fondo, nada tiene que ver con las agresiones espontáneas fruto del descontento o la indignación social, que «están totalmente injustificadas y no se pueden tolerar». Precisamente, el asunto de la seguridad del personal sanitario se abordó días atrás en la reunión que mantuvo el consejero del ramo, Raúl Pesquera, con los representantes del Sindicato Médico, que exigieron que se castiguen estas agresiones «gratuitas» con sanciones administrativas, de lo contrario, «vamos a convocar paros», le advirtieron.
Porque no hace ni una semana que salió a la luz la investigación abierta por la Guardia Civil contra una pareja que había agredido verbalmente, amenazado e intimidado a un médico y a una enfermera del centro de salud de Reinosa, por no recetarles la medicación que pedían. También está reciente la grave agresión a un residente, que perdió parte de la visión del ojo golpeado, y a un celador del SUAP de Los Castros, en Santander. Y en Urgencias de Valdecilla se enfrentaron este verano a un incidente cuyo protagonista sacó a relucir un machete, que introdujo escondido entre la ropa, ante el personal encargado del triaje. El individuo fue detenido ese mismo día y al poco tiempo fue condenado en un juicio rápido, en el que se le impuso una orden de alejamiento. Tanto los sindicatos como los colegios profesionales han expresado de forma reiterada su preocupación por el notable incremento de episodios violentos entre el personal sanitario, reclamando a la Consejería de Sanidad que refuerce las medidas de seguridad.
En su momento, desde el departamento de Raúl Pesquera se anunció que estaba prevista la colocación de cámaras de seguridad en los Servicios de Urgencias de Atención Primaria, pero hasta la fecha no ha habido noticias al respecto. Y mientras tanto, denuncia el Sindicato Médico, «las agresiones continúan; los profesionales nos cuentan que no hay día que no reciban un insulto». Es por ello que insisten en su reivindicación para que se impongan sanciones administrativas, para que las agresiones no salgan gratis. Además, «el SCS está incumpliendo la ley de riesgos laborales, que dice que la empresa debe proporcionar todas las medidas de seguridad para evitar estos 'accidentes laborales' e intolerables agresiones».
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