El conflicto de las basuras: un año desde la salida de Ascán

Los días previos y posteriores al cambio de empresa fueron caóticos: faltaban contenedores, empleados y maquinaria. Incidencias –algunas– que con el paso de los meses fueron resolviéndose, aunque los vecinos siguen sin estar plenamente satisfechos. La queja más repetida es la del mal funcionamiento de la recogida neumática, que no termina de resolverse a pesar de que el Ayuntamiento anunció en marzo que estaban realizando una auditoría para analizar el porqué de su mal estado y las posibles soluciones. Aunque desde la asociación de vecinos de Los Arenales, en la zona de Castilla-Hermida, el presidente Juanjo de la Torre apunta a que algunos buzones sí se han llegado a reparar, no es el escenario predominante entre los más de 200 contenedores subterráneos repartidos por la ciudad.

En un análisis general de Santander, el presidente de la Federación de Asociaciones de Vecinos (Fecav), Ricardo Sainz expone que «quitando el centro, los barrios siguen igual de sucios que antes». Y eso, sin hablar de áreas del extrarradio, como Cueto, «donde los vertederos siguen creciendo en los descampados». Tiene claro cual es, a su juicio, la razón: «No se pueden hacer cada vez contratos más baratos y esperar que las condiciones sean las mismas, hay que pagar el servicio como Dios manda para asegurar su calidad», mantiene el vecino, quien apunta que la ciudad es «cada vez más grande» por lo que lo lógico es que el servicio aumente sus empleados en lugar de reducirlos. También echa de menos que se rieguen más las calles y se retiren las hojas «para evitar que las alcantarillas se colapsen cuando llueva». Critica, además, que en zonas como la calle Alta, Vargas, General Dávila o Cazoña «no se ve mucho a los barrenderos».

Desde la asociación de vecinos de la Alameda de Oviedo, Marián González reconoce que no ve muchos barrenderos, aunque sí percibe que la situación está mejorando. «De vez en cuando amanecemos con contenedores rotos, pero en cuanto se lo trasladamos al encargado nos los repara. Acaban de renovarlos en la zona de Diferente». Cuando echa la vista atrás, recuerda que al principio no se recogía el reciclaje, pues faltaba la maquinaria específica. «Eso ya no pasa, aunque echamos de menos los coches escoba y que baldeen más a menudo». En Castilla-Hermida, De la Torre coincide en una «mejora ligera»: «Ahora vemos a los barrenderos, antes no». También ve más vacíos los contenedores neumáticos y han apreciado que algunos ya están arreglados. «Pero se suma otro problema, la gente que deja la basura fuera. Tiene que cambiar la mentalidad, y si tiene que ser mediante sanciones, que así sea, porque no puede ser».

La visión desde el Ayuntamiento es más optimista. La concejala de Medio Ambiente, Margarita Rojo, apunta que el contrato de PreZero «arrancó llena de dificultades» y que con el paso de los meses ha ido superando los obstáculos. «El 11 de noviembre se formalizó el traspaso, que se produjo con multitud de trabas por parte de la empresa anterior». Uno de los principales problemas a los que se enfrentó la nueva adjudicataria, expone, «fue la falta de información sobre la plantilla disponible a subrogar, aspecto que dificultó el procesamiento, gestión y análisis de esa información». En este sentido, marca febrero de 2022 como «fecha importante», con la incorporación de 15 nuevos operarios que se encontraban en situación de desempleo. «Tres meses después del cambio de concesionaria, la mejora era palpable y el servicio se encontraba en todas sus prestaciones: barridos, baldeos, desratización, limpieza de playas, lavacontenedores, limpieza de pintadas, de sumideros y alcantarillado y recogida selectiva, labores que se vieron reforzadas con las nuevas incorporaciones».

Otra de las grandes dificultades del servicio, según enumera Rojo, fue la retirada de contenedores por parte de Ascán el mismo día que finalizó su contrato, una acción que desde el Ayuntamiento consideraron ilegal y que denunciaron, aunque finalmente el juez lo archivase. «Tuvimos que solicitar la colaboración de otros ayuntamientos que se ofrecieron a ceder de forma temporal sus contenedores de reserva», recuerda la edil. La falta de maquinaria supuso otro revés. «En sus primeras semanas tampoco el parque de maquinaria municipal se encontraba a disposición de PreZero, por lo que fue necesario recurrir a medios externos como alquileres. Actualmente, quedan tan solo medios puntuales por ser puestos a disposición de esta empresa».

Rojo destaca la disminución de las incidencias con el paso de los meses como síntoma de la mejora del servicio. En noviembre de 2021 se registraron 136 incidencias (a partir del día 11), en diciembre, 166; en enero, 97; en febrero, 95; en marzo, 84; en abril, 63. A partir de ese momento empezaron a subir de nuevo. En mayo, 108; en junio, 132; en julio, 95 y en agosto 126.

Salida de Ascán: La empresa saliente dejó el servicio a las 00.00 horas del día 11. El día 10 por la mañana retiraron contenedores que consideraban suyos, lo que les costó una persecución policial y una denuncia del Ayuntamiento.

Llegada de PreZero: Llegó sin listado de empleados, sin maquinaria (Ascán no la había devuelto) y con cientos de contenedores ausentes.

Nuevos contenedores: Santander empieza a recibir cubos desde otros ayuntamientos.

Puntos limpios: Ascán traslada al Ayuntamiento que puede recogerlos cuando quiera, tras mes y medio desde su salida. Pasan varias semanas en reparación por su mal estado.

Más empleados: Se incorporaron 15 nuevos operarios que se encontraban en situación de desempleo. Un año después, el servicio de basuras cuenta con una plantilla equivalente de 275 personas.

Pleitos: Empiezan a resolverse los pleitos entre el Ayuntamiento y Ascán. Aunque las sentencias no son firmes, de momento es el Consistorio el que debe devolver 1,5 millones de euros a la empresa.

Maquinaria: Aún falta maquinaria por recuperar, aunque la gran mayoría ya está en manos de PreZero.

Quejas: En noviembre de 2021 se registraron 136 incidencias; en diciembre, 166; en enero, 97; en febrero, 95; en marzo, 84; en abril, 63, en mayo, 108; en junio, 132; en julio, 95 y en agosto 126.