La difícil tarea de provocar un escalofrío

Hay un mundo entre dar un susto y que la víctima contraiga instintivamente todos los músculos a provocar angustia, miedo y un constante estado de alerta y agitación. En esta segunda tarea trabajan los seis actores que representan 'El Palacio Encantado', en la Magdalena, durante los días 30 y 31 de octubre por Halloween.

Apoyada por música, efectos especiales, proyecciones e iluminación, la compañía Amalgama Teatral, que ha estado trabajando en el guión desde principios de año, recreará, para la sesión infantil, un antiguo palacio en el que habita el fantasma de una niña. En cambio, los adultos serán testigos de cómo una joven desaparece durante un ingenuo juego de la güija. «Los participantes deberán encontrar a la chica. Lo conseguirán pero quizá no sea lo mejor... Lo que necesita el público es salir de aquí con vida», explica la directora de la compañía, Aroa Gómez, con una gran herida en el cuello, metida en el papel de la mujer del jardinero, que apareció ahorcada en el edificio de caballerizas. Todos y cada uno de los personajes forman parte de las leyendas negras que rodean al Palacio de la Magdalena, como el enamorado que se tiró por el acantilado o los fantasmas que aparecen en el cuadro del hall principal. «Esta divertida y escalofriante actividad, más que una representación teatral, que también, es una sala de escape en la que participa el público. Queremos que se sientan dentro de una película de terror», apunta Gómez.

'El Palacio Encantado' tendrá tres sesiones por día para grupos de 50 personas cada una. Las entradas, tanto para los pases infantiles como para los de adultos, están agotadas. La actriz de Amalgama Teatral explica que este formato inmersivo es todo un éxito, «aunque en Cantabria no está muy explotando, con todos los escenarios que podríamos tener, que hay mucho edificio abandonado. Este tipo de actividades suele tener mucho público y no precisamente joven».

En el centro de la ciudad, la peña La Pera la está montando gorda. 'El Pasaje del Terror', que el año pasado recibió 2.000 visitas diarias y cuyo público llegó a esperar hasta dos horas y media en la cola, viene cargado de novedades.

Por un lado, el recorrido es un poco más largo. Abarca 116 baldosas -de 1,20 metros cada una- de la Plaza Porticada, como el largo de un campo de fútbol de Primera, pero con continuos giros hacia la derecha y hacia la izquierda. Es un laberinto de angostos pasillos y techos que vienen y van. Además, contará con photocall y casi 40 figurantes, entre los que están dentro del oscuro pasadizo y los de fuera, que amenizarán la espera. «Está ambientado para todos los públicos, mezclamos el humor con el terror. Pueden visitarnos en sillas de rueda, con carritos de bebé... todo el que quiera», señala Ismael de la Vega, presidente de la peña La Pera.

La temática de este año la destripa esa gran popa que ya está izada en la parte derecha de la Porticada, por lo que los piratas serán los encargados de dar la bienvenida a los miles de visitantes.

El Pasaje del terror se inaugura este sábado, 28 de octubre, a las 17.30 horas y cerrará sus puertas el martes, 31, a las 22.30 horas.

Dicen desde la peña La Pera que no olviden llevar dos cosas importantes de casa: la paciencia (para soportar la cola) y las ganas de pasarlo terroríficamente bien.

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