Enésima avería del ascensor de la Peña del Cuervo

Hay usuarios que, en cuanto intuyen la más mínima avería ya ni esperan, optan directamente por las escaleras. Eso hicieron algunos vecinos ayer por la tarde, cuando la única máquina del ascensor panorámico de la Peña del Cuervo que está operativa (son dos), comenzó a dar problemas. En este caso debido a una incidencia relacionada con las puertas.

La máquina utilizada se quedó parada en la parte baja, por el acceso desde Castilla-Hermida y con las puertas abiertas. Así que los vecinos que bajaban al barrio santanderino lo hicieron andando, sin saber qué ocurría salvo que el ascensor no terminaba de llegar. Finalmente, las personas que querían subir al vial donde se ubica el Parlamento de Cantabria tuvieron que decantarse por la misma opción y también eligieron las escaleras, que son muchas.

No obstante, en ese grupo, hubo quien se negó a cambiar el ascensor por las escaleras. En concreto, un hombre y una joven subieron al ascensor a pesar de que las puertas continuaban sin cerrarse. Así fue hasta que el señor trató de forzarlas, según cuentan otros vecinos que estaban en ese momento esperando para subir. Parece que ese gesto fue suficiente para que el aparato cerrara e hiciera, al menos ese viaje hasta la calle Alta de la que bajaron también varios usuarios. Pero ya está. Una ida y vuelta y volvió a fallar de nuevo.

¿Qué ocurrió? Un fallo en las puertas. El propio sistema detectó el fallo a las 19.58 horas y empezó con las «verificaciones automáticas», explica el concejal del área en funciones, César Díaz. El problema puede deberse a que, por ejemplo, haya un obstáculo que impida el cierre. Entonces la máquina «comienza a testear» para identificar el fallo. Si no consigue resolverlo, emite un aviso automático al técnico que está de guardia. Esa notificación saltó una hora después, a las 21.18. Y ya el profesional se acercó al punto en cuestión en veinte minutos y, finalmente, el aparato quedó en marcha de nuevo a las 21.57, continúa el edil.

Lo cierto es que, a estas alturas, ni los vecinos se sorprenden de ver averiado alguno de los dos ascensores de la calle Alta. El problema de ayer por la noche es que la incidencia se produjo en el único operativo. Resulta que la otra máquina está parada por una «avería grave», segun informó el Ayuntamiento de Santander este mismo lunes.

Ocurre que se han detectado «daños importantes tanto eléctricos como mecánicos» en la máquina que mueve el ascensor y, por tanto, deberá sustituirse. De ahí también los andamios que hay colocados, un paso necesario para acceder y proceder a «desmontar» el aparato que no funciona. Hecho esto, la siguiente actuación será ya el montaje de la nueva máquina, retirar el andamio y «realizar las correspondientes pruebas» antes de reabrir el ascensor para el uso público, explicó el concejal de Fomento en funciones, César Díaz.

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