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Parte del tejado del humilladero situado en la avenida de la Reina Victoria, esquina con la calle dedicada al arquitecto Javier González de Riancho (popularmente Cuesta de Las Viudas), se ha venido abajo por el desgaste de los materiales, según la primera apreciación de los técnicos municipales.
El humilladero, pequeño lugar de culto en esa avenida dedicado a la Virgen del Mar, tiene dos bancos con tejadillo de estructura de madera que soporta tela asfáltica, tejas y cemento. Los técnicos descartan que se haya venido abajo por una acción de vándalos, sino que las inclemencias del tiempo y el peso de los materiales lo han echado abajo.
El espacio fue acordonado por agentes de la Policía Local de Santander y hoy será inspeccionado con detalle por técnicos municipales para estudiar su reparación y ver si es posible que los trabajos sean realizados por los empleados de los talleres municipales o es necesario contratar una empresa externa.
Este lugar devoto en este transitado camino hacia la playa está dedicado a la Virgen del Mar, patrona de la ciudad desde 1980, representada en una imagen impresa en azulejos. Siempre tiene velas encendidas que ponen sus fieles.
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