Un largo tránsito de solares y maquetas

Desde los años noventa el culebrón sólo ha propiciado cambios de objetivos, proyectos fallidos, firmas de arquitectos que quedaron en el camino o la frustrada regeneración de espacios urbanos. Este otoño se postula como el periodo definitivo para que comience la cuenta atrás en la construcción del 'nuevo' Mupac, un objetivo no exento de dificultades dado lo elevado de la inversión, 45 millones de euros, en su estimación inicial, a la espera de un apoyo del Gobierno central que sigue sin concretarse.

El Mupac se construirá en los solares (tres) que ocupaba la antigua sede del Ejecutivo en Casimiro Sainz. La localización, paradójicamente, supone un regreso a los orígenes: los bajos del antiguo edificio de Diputación en Puertochico albergaron el museo de manera estable desde los años cuarenta, pero en condiciones limitadas. En 2017 fue elegido el espacio del actual aparcamiento del Palacio de Festivales en Gamazo como futura y «noble sede» del museo. Una elección que estuvo precedida a su vez de más de medio año de agria polémica durante la cual se sumaron varios municipios que se postularon con sus respectivas infraestructuras y medios para convertirse en sede del Museo.

Hasta diecisiete ubicaciones en la capital cántabra, Torrelavega, Puente Viesgo, Santillana del Mar, Comillas, Villaescusa o Ramales de la Victoria, de trece municipios diferentes, integraron aquella nómina de aspirantes durante 2016. La respuesta masiva ratificaba el valor mediático del ambicioso proyecto, pero no ocultaba décadas de indiferencia, frustración y pasos indecisos en torno a la historia del museo, desde su inauguración el 27 de agosto de 1926 por el rey Alfonso XIII, ocupando unas aulas del Instituto Santa Clara.

La actual exposición de una parte de los fondos del Mupac en el Mercado del Este pese a ser objeto de elogios, se considera insuficiente y no puede contrarrestar la provisionalidad en la que viven sus fondos desde hace décadas. La secuencia ha vivido puntos de inflexión como la del frustrado Museo de Cantabria destinado a la vaguada de Las Llamas, espacio que volvió a ser planteado como posible destino del Mupac en 2016, o la del inmueble del Banco de España después descartada (y hoy futuro espacio del centro asociado del Reina Sofía-Archivo Lafuente).

En el año 2000 se firma un convenio entre el Gobierno y el Ayuntamiento para construir el Museo de Prehistoria (sus nombres fueron cambiando), aunque a mitad de la década el proyecto se estancó. En 2009 se pidió una parcela mayor y se barajó la necesidad de encargar un nuevo proyecto, pero nunca se aclaró su viabilidad y coste. El nuevo horizonte señala que en los primeros meses de 2020 podría estar elegido el ganador del concurso de ideas. A partir de ahí se llevará a cabo la redacción del proyecto definitivo, con lo que a finales del año que viene se iniciarían los trámites de licitación, que podría ser realidad en el arranque de 2021.

Historia, prehistoria, arqueología, arte... El envase, no obstante, siempre predominó sobre la verdadera identidad del edificio. El gran antecedente multiusos del que será el nuevo Mupac fue el Museo Cantabria, un proyecto destinado a la Vaguada de Las Llamas del que se barajaron numerosos nombres y funciones pero que nunca llegó a ejecutarse. En 2002, cinco maquetas (el mismo número del que saldrá ahora el ganador del Mupac) fueron presentadas como aspirantes a ser la silueta del futuro centro museístico. El jurado eligió a los arquitectos madrileños Emilio Tuñón y Luis Mansilla (fallecido en 2012 a los 53 años), autores del Musac leonés, que presentaron un diseño innovador que hacía una clara referencia a los Picos de Europa

Al inicio del presente verano se cumplió una década del derribo de la antigua sede de la Diputación, en la calle Casimiro Sainz, un edificio emblemático del arquitecto Gonzalo Bringas. El solar de Puertochico que, en realidad, se divide a su vez en tres, estaba destinado a acoger la macrosede del Ejecutivo cántabro, plasmada en gran inmueble dibujado por Rafael Moneo. En 2001 el Gobierno encargaba al prestigioso arquitecto el diseño de la edificación que albergaría la mayor parte de la

Administración regional

La parcela de la antigua Diputación mide 1.621,4 metros cuadrados. La crisis acabó con la idea y dejó los solares sin destino hasta que se recobró el objetivo de su conversión en sede del futuro Mupac.

El Mupac permaneció durante siete décadas encajonado en los bajos del antiguo edificio de la Diputación. Hace casi veinte años se firmó un convenio para construir el nuevo museo, que nunca se edificó. En 2013 se abría en la planta sótano del Mercado del Este la actual muestra permanente en 2.000 metros cuadrados.

La apuesta definitiva acaba de arrancar su hoja de ruta con la designación del jurado que seleccionará cinco entre los 73 presentados al concurso de ideas. El ganador puede conocerse al inicio de 2020. La inversión inicial es de 45 millones de euros. El apoyo de la Administración central aún está sin concretar.