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Ángela Casado
Santander
Sábado, 20 de noviembre 2021, 18:12
Un tranquilo paseo durante la noche que termina con explosiones y contenedores ardiendo. Tomás Madrazo, vecino de General Dávila, caminaba con su perro a las dos de la madrugada de este sábado, en el entorno del colegio Salesianos, cuando escuchó un fuerte ruido. Instantes después, ... vio cómo ardía el container ubicado frente al gimnasio Salesport. Casi no le dio tiempo a recuperar el aliento cuando vio que ocurría lo mismo cerca del conservatorio Ataúlfo Argenta, a unos escasos 150 metros. «Se escucharon seis explosiones en total, cada tres minutos aproximadamente, y después empezaban a arder», narra. No fue la única calle que registró incidentes: los bomberos municipales también tuvieron que apaciguar las llamas en Camilo Alonso Vega, Isaac Peral y Duque de Ahumada.
Madrazo cuenta que no vio a alguien concreto quemar los contenedores, sino que la combustión se produjo tras las explosiones. En el caso del cubo ubicado junto al gimnasio sólo ardió uno pero, en el del conservatorio, el fuego se extendió rápidamente al de al lado. «Los policías tuvieron que retirar los contenedores cercanos para que no ardiesen también». Sorprendido por las fuertes llamaradas, este vecino preguntó a los agentes de la Policía Local que se habían trasladado hasta el lugar del suceso para apoyar a los bomberos. «Me dijeron que es algo reiterativo y que casi todos los fines de semana se queman contenedores en la ciudad».
Desde la Consejería de Protección Ciudadana, el concejal Pedro Nalda apunta que tanto la Policía Local como la Nacional están investigando de forma conjunta estos hechos pero que «no se puede confirmar todavía si se trata de un pirómano o si hay una o varias personas implicadas en estos incendios».
La quema de contenedores es un suceso cada vez más habitual en Santander. Hace apenas una semana y media, la misma noche que se produjo el traspaso del servicio de basuras de Ascán a Cespa, el 11 de noviembre, ardieron otros dos cubos y no se pudo confirmar si el hecho tuvo relación con el cambio de empresa o fue casual. Además, durante el verano pasado, no hubo un fin de semana en el que no ocurriesen hechos similares. Y no sólo eso, ya que alguna noche llegaron a arder vehículos aparcados cerca de los containers. El asunto llegó incluso al Pleno del Ayuntamiento, donde el portavoz de Vox, Guillermo Pérez Cosío, preguntó por estos sucesos y pidió que se investigaran, tarea en la que están ahora inmersos los agentes locales y nacionales.
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