Las obras del MAS suman un sobrecoste de 800.000 euros y rozan los 4 millones

La rehabilitación integral, realizada por Copsesa y que ha tardado más de seis años en convertirse en realidad, se dio por finalizada a principios de este mes de enero con intención de inaugurar el museo en mayo, pero la acumulación de proyectos (el básico, el modificado y el refundido) han ido sumando cambios y euros hasta el final. La primera modificación solo afectó a los plazos, que aumentaron en 22 semanas, mientras que esta última ha incrementado el precio.

El documento del servicio municipal de Contratación que ha dado luz verde a incrementar el presupuesto de las obras no concreta el por qué de este aumento del importe, pero apunta a que se debe a «razones técnicas sobrevenidas durante la ejecución de la obra y por causas desconocidas en el momento de la redacción del proyecto». Además, añadía que también se destinaría dinero a «otras mejoras en aspectos tecnológicos relativos a las instalaciones y a la incorporación de avances para la mejora de la eficiencia energética». Desde el Ayuntamiento no han añadido más información, aunque durante el avance de las obras sí apuntaron que la cimentación del edificio había sido más compleja de lo que se esperaba antes de empezar las intervenciones.

Esta subida de precio no es algo que sorprenda a la oposición. El PSOE, desde que se adjudicaron estas obras con un presupuesto muy a la baja respecto al de licitación, auguró que la bajada se compensaría con sobrecostes posteriores: salió por 6.316.579 euros, se adjudicó a Copsesa por 3.053.794 euros y, tras la última modificación, se ha sumado el sobrecoste de 787.317 euros. El portavoz socialista, Daniel Fernández, recuerda que lleva tiempo advirtiendo de las «irregularidades» que acumulaban las obras: «Desde la adjudicación con un 40% de baja en la oferta de la empresa, excesivamente barata para un Bien de Interés Cultural (BIC), hasta incumplimientos de la Ley de Patrimonio señalados en requerimientos emitidos por el Gobierno de Cantabria».

Como apuntan fuentes del PSOE, el anterior Ejecutivo regional (PRC-PSOE) señaló que el proyecto básico que les entregó el Ayuntamiento «no coincidía con las obras que se estaban realizando». «Se les hizo saber para que lo modificaran, pero llegó la campaña, las elecciones, el cambio en el Gobierno... La Junta de Gobierno Local aprobó justo antes el proyecto refundido, pero no trascendió si fue para dar respuesta al requerimiento del Ejecutivo».

Las obras ejecutadas por Copsesa se han desarrollado durante algo más de veinte meses, desde el primer trimestre de 2022. El MAS se encuentra ahora en una fase destinada a la dotación del equipamiento museístico, como el mobiliario y los elementos para las necesidades expositivas. El presupuesto municipal para este equipamiento es de 350.000 euros. La segunda fase, hasta la inauguración, dependerá de las decisiones que adopte la Concejalía y la Dirección General de Cultura respecto al plan museográfico, el contenido de la colección permanente y el criterio de las muestras temporales.

El proyecto ha estado marcado por los trabajos de cimentación y pilares, reforzamiento estructural del inmueble y elementos portantes, modificación de los huecos en los muros de carga interiores, recuperación de las lucernarias y la reducción de cota de acceso en planta baja al nivel de la calle Rubio. Tras la restauración paralela de las fachadas se han sucedido en las últimas semanas de obra los remates de la carpintería; tabiquerías y falsos techos, las instalaciones junto con los acabados y las prueba de las instalaciones.

La complejidad ha estado centrada en lo estructural y la cimentación, según ratificó Ramiro Amorrortu, arquitecto municipal. No obstante, el aspecto general tras las obras no es muy diferente del que presentaba el edificio antes del incendio. Así, las intervenciones durante estos meses han logrado recuperar los elementos y espacios originales del museo, pero, a la vez, han permitido dotar al edificio de limpieza visual y espacial.