El Puerto da luz verde al proyecto del paseo marítimo de Gamazo hasta Los Peligros

Para concretar, es el tramo que va de la zona de las tumbonas (de la rampa del Mundial) hasta la playa. «Es una actuación que teníamos preparada desde hace tiempo en mi etapa en el Ayuntamiento y que lamentablemente en los últimos años estuvo parada sin ningún tipo de avance. Lo que he hecho nada más incorporarme al cargo es tratar de desbloquearlo e impulsarlo», desarrolló Díaz. De hecho, el proyecto como tal ya está contado. Unos 2,5 millones y diez meses de obras. Bancos, zonas verdes y el carril bici (que ya está) a lo largo de unos 450 metros.

La novedad que adelantó Díaz es un paso previo necesario. Un convenio entre la Autoridad Portuaria (que tenía que dar el visto bueno) y el Ayuntamiento. La parte del Puerto pretende tenerla en noviembre, con todo «elaborado y listo para aprobar en un próximo Consejo de Administración». Seguido a esto sí que dejó un recado: «Es algo que se podría haber hecho. Si yo en tan poco tiempo he sido capaz de llevarlo a cabo era igualmente factible haberlo hecho antes». «Cuestión de voluntad», resumió.

Respecto al Plan estratégico empezó destacando el buen momento por el que pasa la entidad. En tráfico, en inversiones, en expansión... «Tenemos que saber aprovechar el momento en el que nos encontramos». ¿Cómo? Con ese plan que «indique con más claridad qué se puede hacer para poder seguir mejorando todo este escenario». «Saber –resumió– cuáles son nuestras oportunidades y nuestro mercado». Y puso un ejemplo. «El tráfico que va por carretera de la zona oeste, Portugal, de Extremadura o del Sur, que pasa a Francia y que luego cruza el Canal de La Mancha. Captar ese transporte para que el puerto sea una alternativa, para que los operadores se planteen esa posibilidad con un escenario competitivo».

La parte emotiva estuvo en los abrazos y en los discursos. De los primeros, tal vez los más sentidos fueran con Íñigo de la Serna y Gema Igual, a los que alabó desde el atril como amigos y como alcaldes. A ellos, en la lista de regidores santanderinos, se sumó Gonzalo Piñeiro (estuvieron también los alcaldes de Camargo y El Astillero, entre otros).

«Sí, estoy contento», quiso aclarar Díaz respecto de su salto de la política municipal a la labor portuaria. «Tengo una ilusión desbocada». Mezcló ambas trayectorias al hablar de la mejora de «la integración puerto-ciudad». «Puerto, región, ciudad», añadió más tarde. En eso incidió también Gema Igual, que definió a Díaz –entre alabanzas– como «artífice y protagonista de los 75.000 metros cuadrados» portuarios que se han ganado para los santanderinos en estos años.

Estuvo la plana mayor del Gobierno de Cantabria (encabezada por su presidenta, María José Sáenz de Buruaga), la delegada del Gobierno (Ainoa Quiñones) y varios de los expresidentes de la Autoridad Portuaria (Francisco Martín, Jaime González, José Joaquín Martínez Sieso y Christian Manrique), entre otros.

Buruaga, artífice del nombramiento y consciente del movimiento que saca a Díaz del Consistorio, agradeció a Igual su «generosidad» y destacó que, desde el nuevo cargo, el exedil tendrá una «maginífica oportunidad» de trabajar también para la capital. «Por primera vez en muchos años, Gobierno, Puerto y Ayuntamiento van a ir de la mano», dijo la presidenta, que habló después del presidente de Puertos del Estado, Álvaro Rodríguez Dapena. Más técnico en su intervención, recordó el «ciclo expansivo» que vive el puerto e invitó al nuevo presidente a «no sólo mirar al mar». «Tenemos que mirar a tierra y generar cadenas marítimo-terrestres» .