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Hasta ahora eran todo plazos estimados, porque una cosa son las intenciones y otra la realidad. «Ahora ya podemos hablar sobre seguro porque esta mañana se ha reunido el consejo de Gesvicán y ha declarado la obra de emergencia, un trámite previo e indispensable para ... acometer el desescombro», explicó ayer el consejero de Obras Públicas, José Luis Gochicoa. Los trabajos se adjudicaron también ayer de manera oficial a la empresa Rucecán, algo que estaba anunciado desde la pasada semana; pero que precisaba de la rúbrica del consejo de la empresa pública. «También contamos ya con el permiso municipal y se ha nombrado al director de obras y al coordinador del plan de seguridad y salud».
En definitiva, todo está listo para que próximo lunes, día 27, arranquen las labores de desescombro del parque derrumbado. Entre tanto, hoy y mañana finalizará el apuntalamiento de la zona del garaje 4 al que no se tenía acceso, que no se derrumbó pero quedó pendiente de un hilo y que está colindante a la zona del garaje 2. Un paso previo que se ha demorado por razones de seguridad y que es crucial para poner en marcha el desescombro.
Se utilizarán tres máquinas que accederán a los garajes y se colocarán en diferentes puntos del interior. Dos estarán equipadas con grandes cizallas para cortar y desmenuzar el material y una tercera es la que se ocupará de cargar todo lo recogido en dos tipos de camiones que se dirigirán a las instalaciones de la empresa Valoria en Camargo. En total, se retirarán hasta 3.000 toneladas de escombro y también 8.000 metros cúbicos de tierra de la superficie.
Primero en la zona derrumbada, sobre los garajes 3 y 4. Y también en el parque sobre el garaje 1, que no quedó afectado en el incidente pero que debe aliviar carga según indicaron los estudios estructurales realizados tras el incidente. «No es que corra peligro de derrumbe como ha sucedido con la zona siniestrada, pero los informes de los ingenieros acreditan que si se produce una sobrecarga adicional de cualquier tipo, sí que podría resultar un exceso de peso para la placa de hormigón que sostiene dicho parque», asegura Gochicoa.
Acometer esa obra en superficie es crucial para que los residentes puedan acceder a sus vehículos y trasteros en el garaje 1, algo que llevan demandando desde hace semanas. «Pero la seguridad llegados a este punto es fundamental y hay que tener toda la precaución antes de ponerlo de nuevo en servicio».
Todos los trabajos se desarrollarán en jornadas de mañana y tarde, que comenzarán a las ocho para finalizar a las ocho de la tarde. Y entre tanto, continuarán los trabajos de los topógrafos en busca de datos para completar el informe sobre lo que llevó al accidente del pasado lunes día 13.
Todo el plan de seguridad y salud se ha elaborado también teniendo en cuenta la demanda de los vecinos, que han solicitado que las obras se realicen con el menos impacto posible para su día a día. «Se trabajará de manera que generemos el menor ruido posible y también se minimizarán las vibraciones porque son muchos los vecinos que se han quejado de que han aparecido grietas en sus hogares tras el estruendo a raíz del accidente», confirman los técnicos de Gesvicán.
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