El traslado de la parada de taxis de la plaza de Italia provoca las críticas del sector

Representantes del gremio de los taxistas, convocados ayer por el Ayuntamiento para conocer la «nueva y definitiva ubicación», expresaron sus críticas a este cambio al entender que salen perjudicados. «Con el traslado perdemos toda la visibilidad; no se nos ve ni desde la puerta del Casino ni desde la entrada del hotel Sardinero. Hemos ofrecido alternativas que no se han tenido en cuenta y, al final, nos echan de mala manera y nos ocultan, como si molestara este servicio público», manifestó Manu Andoni Ruiz, presidente de Radiotaxi de Santander. Con el cambio, la parada quedará muy visible desde la playa de El Sardinero, «pero eso repercute en el negocio dos meses al año», añadió.

En la avenida Fernández Castañeda, «una vía principal de El Sardinero», destacó el jefe de servicio de vialidad del Ayuntamiento, Antonio Gutiérrez, se ha comenzado a picar la acera para ganar anchura para los taxis. Esta área será la cabecera de la parada. La parada que desaparece de la plaza de Italia es «centenaria y la más antigua de la ciudad. Tenemos fotos de cuando en ella paraban coches de caballos haciendo servicio de taxi», resaltó Ruiz.

Por su parte, los taxistas han pedido al Ayuntamiento que «se aumente la cabecera de la parada con dos coches más para que se nos vea desde la plaza de Italia», insistieron. Pero para resolver el problema, el Ayuntamiento ha ofrecido colocar una señal luminosa, que «se verá mucho más que la luz verde habitual de los taxis», expresaron.

En cambio, la propuesta no satisface a Ruiz, que se quejó de que «todos sabemos como funcionan las señales lumínicas de la ciudad. No confiamos en esta propuesta, a la vista de los resultados y viendo que no tenemos señal de parada en una larga lista de ellas desde hace años, a pesar de que las reclamamos en infinidad de ocasiones». «Siempre se prioriza por la hostelería», opinó.

La fisionomía de la plaza de Italia cambiará por completo cuando finalicen los trabajos. En la plaza se cortará el paso al tráfico rodado con la única excepción de un vial de acceso al Hotel Sardinero, que enlazará con la avenida de Los Infantes «y por el que podrán circular los taxis, pero quedará cerrado al resto de vehículos», destacó Díaz.

La zona de carga y descarga de la calle Panamá también se trasladará y «pasará a compartir espacio con las plazas de aparcamiento libre que se mantendrán al inicio de la calle, en horario de mañana», explicó el concejal César Díaz.