Cruz Roja prestó atención el año pasado a más de trescientas personas sin hogar

El proyecto se denomina 'Atención integral a personas sin hogar' y cuenta actualmente con un equipo de tres profesionales: dos integradores sociales y una trabajadora social, que trabajan 30 y 20 horas a la semana, respectivamente. La pensión La Principal, de Barreda, dispone de seis plazas asignadas para los usuarios, que en determinadas ocasiones son reforzadas con otros alojamientos. El servicio se presta durante toda la semana, tanto en horario de mañana (de 10.00 a 14.00 horas) como de tarde (de 16.00 a 20.00 h).

Entre las novedades incorporadas el pasado año cabe destacar los rastreos por la ciudad, un iniciativa pionera en Cantabria para localizar por la calle a personas sin hogar que, por diferentes motivos, no utilizan el servicio que presta el Consistorio y a las que se ofrece alojamiento y alimentos.

El alcalde Javier López Estrada recuerda que en 2019 el Ayuntamiento se vio en una situación «complicada», cuando por «circunstancias vitales» -falta de relevo generacional- de la congregación religiosa que atendía el Hogar del Transeúnte, fue necesario «buscar una alternativa y tuvimos la ayuda de Cruz Roja para seguir prestando ese servicio adaptándolo a las necesidades sociales y humanas que necesitábamos». Por eso, la institución humanitaria tiene el «agradecimiento incuestionable» del Consistorio, porque «estuvo en ese momento y ha seguido prestando un muy buen servicio y posicionando a Torrelavega como lo que es: una ciudad solidaria, una ciudad humana, que se ocupa de la gente que está en peores dificultades».

El programa «goza de buena salud» y la apuesta y el compromiso del Ayuntamiento es «firme», recalca el regidor, avanzando que las obras de construcción del nuevo Centro Asistencial se desarrollan con normalidad y la previsión es que en 2023 «el edificio esté finalizado y en marcha el nuevo sistema de gestión para prestar los servicios».

La concejala de Bienestar Social Laura Romano expresa su «satisfacción» por el desarrollo de este proyecto, al que «concedemos una gran importancia». Además, destaca las mejoras que se han ido introduciendo en el programa, como la «flexibilización» del tiempo de estancia, que era de tres días y ahora «se analiza caso por caso y se adapta a las circunstancias del usuario».

También se ha incorporado el servicio en el mes de agosto, de forma que ahora se presta los 365 días del año «la acogida, valoración, diagnóstico individual y seguimiento a las personas sin hogar». Los talleres, que abarcan desde hábitos saludables a conocimiento sobre la red de servicios asistenciales y habilidades sociales, son otra mejora que ha mencionado. «Es un trabajo de atención integral que encamina a los usuarios al fin del sinhogarismo», subraya.

La coordinadora del proyecto, Alba Gómez, explica que de las 312 personas atendidas el año pasado, 26 eran mujeres, el doble que en 2020. El perfil del usuario es de un hombre, español y de más de 40 años, parado de larga duración o con un trabajo muy precario. Respecto a los rastreos por la ciudad, indica que el año pasado se realizaron 18 salidas, en las que se logró que 9 personas entrasen al programa. La presidenta local de Cruz Roja María Eugenia Bouzas indica también que están «muy satisfechos» con este proyecto.