Fomento pide licencia para ampliar la campaña de catas del soterramiento

La integración ferroviaria en Torrelavega, pendiente desde hace varias décadas, avanza en su tramitación previa. Los portavoces de los grupos políticos que integran la Corporación eligieron en abril, por unanimidad, una de las dos propuestas presentadas por el Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif) para realizar la obra: instalar una vía provisional por el Bulevar Ronda, paralela al río, para que circulen los trenes de mercancías mientras se realiza el ansiado soterramiento, cuya duración rondará los dos años.

Los pasajeros deberán hacer transbordos en autobús entre las estaciones de Torrelavega, Barreda y Puente San Miguel. Los técnicos, tanto del Ayuntamiento como de Adif, consideran que esta opción es más viable que la otra: mantener el trazado actual de las vías mientras se ejecutan los trabajos, alternativa que resultaría más costosa y de mayor duración que la primera, que no estaba prevista en el proyecto original del soterramiento.

El Ministerio de Fomento, a través de Adif, adjudicó en noviembre la redacción del proyecto básico y constructivo de la integración ferroviaria en Torrelavega a la UTE Geocontrol-TRN en 1,6 millones, con un plazo de ejecución de 16 meses. La campaña geotécnica se inició en mayo y en principio afectó a las calles Ángel Laguillo, Alcalde del Río, Pancho Cossío, Carlos Pondal, José Pedraja y José María Pereda.

Geocontrol y TRN señalan ahora que para la correcta realización del proyecto es necesario ampliar la campaña geotécnica con una serie de prospecciones y ensayos en terrenos del Ayuntamiento. Concretamente, quieren realizar un sondeo, cinco calicatas mecánicas y cuatro ensayos de penetración dinámica, trabajos que realizará la misma empresa que los anteriores (INGE). Estas nuevas catas tienen un presupuesto de 2.830 euros y se realizarán en las calles Antonio Bartolomé Suárez y Lucio Marcos, ambas paralelas al Saja-Besaya.

Los sondeos se llevan a cabo mediante maquinaria de perforación, realizándose un taladro en el terreno de entre 10 y 20 centímetros de diámetro. Después del reconocimiento, únicamente queda un tubo protegido por una pequeña tapa metálica para la medida de los niveles de agua. La máquina de perforación puede ir montada sobre camión o sobre orugas. La duración de estas prospecciones es de varios días (según la profundidad).

Las calicatas mecánicas son excavaciones superficiales que se realizan con retroexcavadora convencional. La profundidad de la excavación será de unos tres metros y el hueco de perforación es un rectángulo de cerca de un metro cuadrado. Una vez concluido el ensayo, se procede a tapar con las mismas tierras extraídas del agujero realizado. La duración de esta prospección es muy rápida (inferior a dos horas). Los ensayos de penetración dinámica consisten en hincar en el terreno una tubería de acero mediante el golpeo de una masa que se deja caer desde una determinada altura. La duración de esta prospección es también inferior a dos horas.

Las tres administraciones implicadas (Adif, Gobierno de Cantabria y Ayuntamiento) han firmado un convenio para el soterramiento (79,1 millones), siendo el reparto de financiación del 50%, 30% y 20%, respectivamente. Dicho convenio de colaboración, válido para el periodo 2018-2022, desarrolla el protocolo firmado con Feve (hoy integrada en Adif) en mayo de 2011, documento que establece las bases para llevar a cabo la integración del ferrocarril, así como la transformación urbanística derivada de las obras. El acuerdo incluye el soterramiento de la línea de ancho métrico entre los pasos a nivel del Paseo del Niño y Pablo Garnica (1.800 metros), la construcción de una nueva estación soterrada, la adecuación de la actual, la urbanización de los aledaños de ambos edificios y la transformación urbanística del espacio liberado.