Una noria gigante de 40 metros se une al programa de fiestas de La Patrona

El equipo de gobierno (PRC-PSOE) de Torrelavega lleva años detrás de la idea de instalar una gran noria en la ciudad, iniciativa que se ha intentado en Navidades y en pasadas fiestas patronales, pero que en el último año se ha visto truncada debido a la situación provocada por el covid. Además, la contratación de la llamativa atracción, de 40 metros de altura, ha resultado hasta ahora «francamente difícil» porque «hay muy pocas en España», según señala López Estrada, quien ha reconocido que ahora «tenemos esta posibilidad debido a que se ha reducido el número de contrataciones de este tipo de espectáculos por la pandemia».

La noria funcionaría durante las fiestas, entre el 13 y el 22 de agosto, en una zona acordonada para evitar aglomeraciones de personas, y siguiendo en todo momento los protocolos de seguridad establecidos por las autoridades para este tipo de atracciones. Obligación de llevar mascarilla, disposición de gel hidroalcohólico, limitación de plazas en cada cabina o cunita (sólo pueden llenarse si es por miembros de la misma unidad familiar), desinfección de las mismas tras cada viaje, indicación de rutas para entrar y salir, así como distancias de seguridad.

El objetivo es instalarla en la Plaza Mayor, un lugar «idóneo» por «las dimensiones, el peso y la superficie llana». La atracción sería de pago para los usuarios y el Ayuntamiento sólo tendría que asumir el coste eléctrico y la ocupación de suelo público, una cuestión importante, dado que la gran bola que iluminó la Navidad en diciembre de 2017 y principios de 2018 no volvió a brillar en la ciudad por las críticas a su elevado coste (77.000 euros).

Norias Sánchez es la empresa que ha ofrecido al Ayuntamiento de Torrelavega esta atracción, avalada por los más de 80 años que esta familia lleva trabajando en el mundo de las ferias, y más concretamente en el de las norias, lo que otorga a sus espectáculos una garantía con los tests de seguridad y fiabilidad más exigentes de la Comunidad Europea.

Con 40 metros de altura y una capacidad para 136 personas, la noria gigante que se instalará en Torrelavega está entre las atracciones más grandes del mundo. Esta compañía se encarga tanto de la instalación como del desmontaje y sus profesionales están cualificados para realizar ambos procesos en el menor tiempo posible, respetando siempre las medidas y la normativa de seguridad. Además de por su espectacular estética, esta noria destaca por su no menos sobresaliente iluminación.

Propiedad de Atracciones Sánchez, una familia de feriantes naturales de Úbeda (Jaén), este gigante trabaja seis meses al año (durante el invierno se le mima con labores de mantenimiento) y sólo suele instalarse en ciudades como Sevilla, Albacete, Málaga o Gijón, además de en el municipio de origen de sus propietarios. Acude sólo a grandes ferias y fiestas porque necesita un gran espacio y porque montarla y desmontarla (precio del suelo aparte) cuesta en torno a los 10.000 euros.