Secciones
Servicios
Destacamos
Las bases para rehabilitar el recinto ferial de La Lechera y convertirlo en un centro de arte ya están sobre el papel. Después de años de promesas y sólo palabras, los detalles de esta transformación, una de las dos partes de la obra llamada a ... convertir la antigua fábrica en un centro cultural de referencia en el norte de España, ya han sido cincelados en piedra y traducidos a un proyecto de ejecución. Ese documento es la hoja de ruta básica de las obras, la antesala de un concurso público valorado en 3 millones de euros y que, como ha avanzado este miércoles en la propia instalación el vicepresidente y consejero de Cultura del Gobierno de Cantabria, Pablo Zuloaga, será convocado «en diciembre» con vistas a comenzar la transformación cultural de la fábrica en los primeros meses del año que viene. «Conseguimos pasar de las palabras a los hechos», ha celebrado el consejero, convencido de la magnitud del proyecto y, sobre todo, la «infraestructura cultural» que este otorgará tanto a la ciudad como a su antigua azucarera, llamada a cobijar tanto la Colección Norte de arte contemporáneo, primero, como las escuelas culturales del Ayuntamiento –folclore, arte, música, circo...–, en la segunda fase, por otros seis millones de euros.
Noticia Relacionada
Daniel Martínez
Pero antes va la primera fase. Los tres millones que han cogido carrerilla este miércoles se centrarán sólo en la rehabilitación de las naves que están más próximas a la Piscina Municipal. Estos inmuebles están llamados a configurar el nuevo Museo de Arte Contemporáneo, la primera de las tres patas que, junto al centro cultural y las Escuelas de Arte, se irán levantando durante la próxima legislatura (2023-2027). Ese es el plan al menos.
Está por ver cuánto tardan los futuros artistas de Torrelavega en conocer su nueva sede –hoy se encuentran dispersos en diferentes espacios–. Entre tanto, los planes que destapa el Gobierno de Cantabria se ciñen a este nuevo museo de arte, el primero de la ciudad, un paraguas de 1.230 metros cuadrados y que pondrá fin al proceso emprendido por la Consejería en 1996 para dotar de un «espacio digno» a un erario regional cercano al millar de obras.
Estos bienes harán de Torrelavega la «capital del arte contemporáneo» y supondrán un «revulsivo» para una ciudad convertida en «uno de los puntos de referencia» en el norte de España. Al margen de las palabras que han alternado Zuloaga, el presidente regional Miguel Ángel Revilla o el alcalde de Torrelavega, Javier López Estrada, han sido las alumnas de la Escuela de Circo –en grupo o en solitario, con Cecilia Vega– o la creadora gráfica Marta Valledor las que, con su talento a lo largo de la cita, han revelado el músculo artístico de la comunidad autónoma y el sentido de una rehabilitación esperadísima por parte del sector.
Ese cariz de deuda impregnó una parte del discurso de Zuloaga, tan consciente de la dispersión que sufre la escena cultural como seguro del acicate que este centro supondrá para la ciudad. «Es vital que la ciudad disponga de nuevas dotaciones y espacios culturales. Vamos a dotar a esas escuelas de un espacio adecuado y en condiciones inmejorables. Este proyecto es, además de bueno, justo con Torrelavega». Zuloaga ha sido el segundo de los tres ponentes encargado de poner voz a esta presentación, a la que ha acudido una amplia representación de la sociedad civil y política de Cantabria.
Antes que él, López Estrada hizo un breve repaso de la historia de la azucarera (1899) y su valor como primer Bien de Interés Cultural (BIC) catalogado en la ciudad. Tras ambos dos, Revilla se mostró convencido del poder de atracción de la futura Lechera: «Atraerá a mucha gente. Torrelavega tiene que volver a recuperar gente que venga».
La propuesta del estudio madrileño Archs&Graphs, el ganador del concurso de ideas de la Consejería, concibe una Lechera más abierta, iluminada y funcional que nunca para sus usuarios. Hay distintos cambios que revelan la predilección del proyecto por estas ventajas, desde la apertura de ventanales y lucernarios hasta la adaptación de cada espacio del centro a una finalidad. El proyecto presenta un lugar realmente versátil. Salas diáfanas dominadas por un ladrillo de estilo industrial para exponer las piezas de la Colección Norte, aulas diferenciadas para la danza o el circo, salas polivalentes y una biblioteca, un plató y un estudio audiovisual en la planta superior... Mucha cultura y mucha sinergia, gracias a la conexión que ofrecerán las galerías.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.