Santander recuperará los vuelos con Tenerife y Gran Canaria a partir de primavera

Los billetes se pondrán a la venta después de las Navidades, con unos precios iniciales que rondarán los 100 euros por trayecto. En las tarifas se incluye elección de asiento, maleta y snack a bordo. Uno de los grandes atractivos de estas conexiones es que Binter permitirá viajar, de forma gratuita, al resto de islas del archipiélago canario a todo aquel que vuele desde el Seve Ballesteros. Es decir, todo pasajero que viaje desde el aeropuerto cántabro al de Gran Canaria o al de Tenerife Norte y prefiera ir como destino final a Lanzarote, Hierro, La Palma, La Gomera o Fuerteventura, no tendrá que pagar por ese vuelo adicional interinsular.

Binter tomará el testigo de la compañía de bajo coste Ryanair, que conectaba hasta ahora Santander con las capitales canarias, rutas que la compañía irlandesa ha suspendido por el cierre de bases realizado en el archipiélago. La de Gran Canaria dejó de operar este otoño y la de Tenerife Sur finalizará el 4 de enero. En esta tesitura, el Gobierno de Cantabria ha movido ficha de forma rápida y ha llegado un acuerdo con la compañía canaria para no perder unos destinos que hasta la fecha han movilizado a más de 60.000 pasajeros, de los cuales 40.000 corresponden al vuelo a Tenerife Sur, que operaba durante todo el año, y 20.000 al de Gran Canaria, que únicamente funcionaba en la temporada de verano.

«Este un mercado importante y el Gobierno de Cantabria se ha puesto a trabajar para paliar esta situación», subrayó este martes Miguel Ángel Revilla, que presentó las conexiones canarias junto al presidente de Binter, Pedro Agustín del Castillo, la consejera de Turismo, Marina Lombó, y el de Industria y Transporte, Francisco Martín.

Binter Canarias será así la séptima aerolinea que trabajará en el aeródromo Seve Ballesteros, sumándose a Iberia, Wizz Air, Volotea, Vueling, Ryanair y Lauda, que se estrenará también en Santander a partir de la próxima primavera a través de una ruta con Viena que se pondrá en marcha el 30 de marzo.

Las conexiones con las islas Canarias, con una duración aproximada de entre dos horas y media y tres, se realizarán con un avión «absolutamente moderno», un modelo Embraer E195-E2, recientemente adquirido por Binter, que se convierte en la primera aerolínea europea en operar con este tipo de aparatos de última generación. Su capacidad es de 132 pasajeros.

Revilla destacó que el aeródromo cántabro batirá este año su récord de pasajeros, superando el tope de 1,1 millones de viajeros, un 6% más que en 2018, cuando el incremento nacional es «bastante menor». A su juicio, la apuesta que ha realizado el Ejecutivo regional por el aeropuerto desde que él llegó a la presidencia en 2003, «que en su momento parecía utópica», ha sido «un éxito total y ha contribuido poderosamente al incremento del turismo en Cantabria». Las cifras así lo demuestran: se ha pasado de 230.000 viajeros en 2003 a los más de 1,1 millones con los que se cerrará 2019.

Binter celebra este año su 30º aniversario: comenzó a operar en 1989 con vuelos regionales entre todas las islas canarias, política que mantiene en la actualidad y a la que ha sumado rutas nacionales e internacionales. En 2002, la compañía, que hasta entonces había pertenecido a Iberia, pasa a manos de unos inversores canarios.

Tres años después, en 2005, Binter comenzó su expansión, operando rutas entre el archipiélago y algunos puntos de África y Portugal. En 2012 Binter vive una segunda fase de expansión internacional, con nuevos destinos.

En 2018 la compañía comenzó a ofrecer vuelos regulares con otros puntos de España, siendo ahora el Seve Ballesteros el sexto aeropuerto de la Península con el que se comunica, tras Madrid, Murcia, Pamplona, Vigo y Zaragoza, al que hay que sumar el insular de Palma de Mallorca.