Herrán alega que un defecto de forma no puede anular todos los votos de Cartes

El extenso recurso –diez folios– con que el grupo afín a la alcaldesa de Castro Urdiales reclama que se dé por bueno el primer recuento de votos, en el que Herrán resultaba victoriosa por un estrechísimo margen –un 51% frente al 49%–, plantea como argumento principal que un defecto de forma no es causa suficiente anular los resultados de toda una mesa electoral, una decisión que dio un vuelco al resultado, proclamando ganador a Zuloaga.

Susana Herrán, con su candidatura alternativa a la oficialista del secretario general del PSOE cántabro, Pablo Zuloaga, se impuso el pasado domingo por una diferencia de treinta votos en las elecciones para acudir al Congreso Federal socialista a celebrar en Sevilla. Ese mismo día, Zuloaga impugnó el resultado por una incidencia registrada en el centro de votación de Cartes, donde una de las vocales no figuraba como dada de alta en el partido.

El Comité Regional de Ética, órgano responsable de decidir sobre el caso, resolvió este pasado miércoles anular todos los votos de esa mesa, lo que convierte a Zuloaga en vencedor por una ventaja mínima, con 970 apoyos de los militantes contra los 968 de su oponente.

Ahora, ese mismo Comité Regional de Ética deberá decidir, en un plazo de 24 horas –hoy mismo tiene que comunicar su resolución–, si da por buenos los argumentos de la lista de Herrán, que reclama que se respete «la voluntad de la militancia».

«La resolución de la Comisión de Ética mezcla el concepto de quienes pueden ejercer su derecho a voto, y los requisitos y restricciones a ese derecho –ser afiliado fundamentalmente– con la actuación de un tercero, que no es ni elector ni elegible, y por tanto que nunca llegó a votar, para invalidar la voluntad de la totalidad del cuerpo electoral, en este caso los afiliados pertenecientes a la Agrupación del PSOE de Cartes», indican desde el entorno de Herrán. «Esto supera cualquier norma de democracia interna, privar a todas esas personas que son militantes, de esos derechos constitucionales aludiendo a la presencia de un tercero, que por si no fuera suficiente, ni votó ni participó, siendo por ello irrelevante en cuanto al resultado electoral».

El culebrón del PSOE cántabro todavía podría contar con un nuevo capítulo: si el Comité Regional de Ética no atendiera finalmente este recurso de la candidatura encabezada por la regidora castreña, ésta podría acudir todavía, en un plazo de 24 horas, a la Comisión Federal de Ética y Garantías de Madrid, que, en idéntico periodo de tiempo, dictaría una resolución definitiva.

Sea cual sea el resultado final de esta pugna, las elecciones han sacado a la luz el enfrentamiento entre las dos familias del PSOE cántabro lideradas, respectivamente, por Pablo Zuloaga y el diputado nacional Pedro Casares, que previsiblemente se irá volviendo más duro conforme se aproxime el Congreso Regional, previsto para la próxima primavera, en el que se decidirá quién se pone al frente del PSOE en la Comunidad.