«¿Injerencias? Sólo ha habido discusiones estratégicas. No alimentaré la polémica»

«No ha habido nada más que el trabajo cotidiano. No voy a alimentar ninguna polémica», afirmó Miguel Rodríguez durante la presentación de los dos nuevos integrantes de su equipo al ser preguntado por esas «presiones e injerencias» a las que hace referencia Navas. Y más de lo mismo en relación a los desencuentros entre ambos responsables de la pandemia en los últimos meses, motivo que precipitó el cese de la máxima responsable técnica de la lucha contra el covid a las puertas de la tercera ola.

«No vayan por ahí -avisando a los periodistas- porque no ha habido más que las discusiones normales en un equipo de trabajo cuando se habla de casos o estrategias. Fuera de ahí no ha habido nada raro», apuntó.

Como adelantó este periódico, esa disparidad de criterios en algunos asuntos ha sido lo que ha hecho imposible la continuidad de Navas en el departamento que dirige Rodríguez, que trató de dejar claro que no se han producido choques personales y que cualquier desencuentro se enmarca en aspectos técnicos.

El consejero evitó hacer frente a las acusaciones más o menos veladas de su exsubordinada, pero sí respondió a la oposición que, en pleno, relacionó el cambio de cromos en Sanidad con los malos datos que ha dejado el inicio de la campaña de vacunación, con tasas de administración de dosis -ya corregidas- muy por debajo de la media.

«Es cierto que el cese estaba previsto desde hace tiempo. No es una cosa improvisada. Es una salida pactada y ordenada». Según defendió, nada que ver una cosa con la otra a pesar de que, como ha podido saber este periódico, este asunto no ha sido la clave del cese, pero sí ha precipitado los acontecimientos: «Son dos hechos claramente diferenciados. No vinculemos el cambio en la Dirección General de Salud Pública con ello, aunque no voy a revelar en qué fecha concreta hablé con el doctor Wallmann porque eso quedará entre él y yo».

Las explicaciones del consejero sobre las «injerencias» que denuncia Navas no han sido suficientes para el PP. Además de calificar estas acusaciones como «muy graves», el diputado popular César Pascual pidió ayer a Miguel Ángel Revilla, como responsable último de la gestión de la pandemia, que «tome cartas en el asunto y dejen de taparse las responsabilidades».

Pascual recordó que el presidente regional ha dicho en reiteradas ocasiones que, en la lucha para contener la pandemia, las decisiones se adoptan en base a informes técnicos y a las directrices que establecen el Ministerio y las comunidades. Por ello, a juicio de Pascual, Revilla debe aclarar ahora «a qué se refiere la ya exdirectora de Salud Pública» cuando habla de esas «injerencias políticas».