Novo Banco refuerza sus equipos para desentramar la actuación de Jacobo Vidal

No es el único refuerzo específico para este asunto. Hace una semana, Novo Banco aseguraba a El Diario que la investigación interna sobre el caso de la oficina que mantuvo abierta en la capital cántabra hasta diciembre seguía «su curso, abierta y avanzando». Ahora se sabe que a su equipo de auditoría interna habitual en España se ha sumado un grupo de apoyo de auditores venidos desde la matriz en Portugal. Su labor sería la de contrastar los documentos oficiales con los que cuenta el banco con la información que proporcionaba Jacobo Vidal a los clientes.

Todo, en la misma semana en que se ha conocido que los representantes del grueso de los afectados han enviado un requerimiento notarial a la firma para que se les reintegre la totalidad del dinero. «Durante todo este tiempo, casi dos semanas, la realidad es que el banco no ha negociado absolutamente nada», explicaban hace días.

Desde Novo Banco -más para insistir en su postura que para entrar a una dialéctica de respuestas- destacan en este sentido que siguen «realizando, a diario, reuniones exhaustivas con los clientes afectados para determinar la situación concreta de cada uno de ellos». Eso, y también que han «puesto todos los medios posibles para esclarecer lo ocurrido y actuar con plena transparencia». Dos ideas que se suman a la frase que han utilizado desde el principio como tarjeta de visita en cuanto a sus intenciones (y que siguen usando): «Novo Banco atenderá los derechos legítimos de sus clientes afectados y asumirá sus compromisos de forma trasparente de acuerdo con la legalidad».

Pero queda, además, un tercer refuerzo en su estructura ante este asunto, más allá de auditores y forenses externos. La entidad ha incorporado a su equipo jurídico al bufete de abogados King Wood Mallesons en el caso abierto contra el exempleado. Cabe recordar en este sentido que el Juzgado de Instrucción Número Tres de Santander ha admitido a trámite una querella de Novo Banco contra Jacobo Vidal (una decisión contra la que cabe recurso). Con ello, y a lo largo de todo su discurso desde el principio, inciden en su papel de víctimas de la actuación del que fuera su empleado. De hecho, destacan que todos estos equipos de refuerzo «están trabajando de forma intensiva tratando de resolver la actuación independiente del exempleado dado el elevado volumen de documentación que se está analizando». El apunte de «actuación independiente» es decisivo en esta línea.

En la querella incluían los «daños reputacionales» que, a su juicio, les acarrea este asunto. Es otro punto destacado para Novo Banco. Que la actuación de Vidal atentó directamente contra su reputación como empresa en una actividad basada absolutamente en la confianza entre los clientes y la compañía.

En resumen, víctimas y también colaboradores. Ejes de la posición que desean mantener ante una semana decisiva. «El banco -aseguraron ayer a este periódico- está trabajando en total y permanente colaboración con las autoridades judiciales y con pleno respeto al rigor procesal». A ese rigor apelan para no desvelar, por ahora, ningún detalle más.