Ofensiva de la oposición contra el consejero de Sanidad a cuenta de las vacunas del covid

Las tres fuerzas políticas con representación en la Cámara a la derecha del Ejecutivo (Partido Popular, Ciudadanos y Vox) y también otras extraparlamentarias como Podemos e Izquierda Unida han elevado el tono de sus críticas, hasta el punto de pedir la cabeza del titular de Sanidad, Miguel Rodríguez, como hicieron la semana pasada desde el PP y ayer volvió a recordar el portavoz naranja, Félix Álvarez, para el que los últimos acontecimientos son una «vergüenza intolerablepor la que vamos a exigir su dimisión».

Además de los desajustes que, en su opinión, se están produciendo en la campaña de vacunación, desde Vox, después de que la cesada Paloma Navas denunciara «injerencias políticas» a la hora de aplicar restricciones contra el covid-19, también exigen una mayor transparencia en la aplicación de las medidas. En concreto, que cada vez que se cambien las normas, la decisión del Ejecutivo se acompañe del informe de los técnicos que sirve de apoyo.

«El Gobierno regional no tenía plan de vacunación y ha intentado contrarrestarlo vacunando a colectivos que no son de primera línea», subrayaba ayer el portavoz de Sanidad del PP, César Pascual, en relación a la llegada de las dosis al penal de El Dueso (Santoña) durante el fin de semana. Un colectivo que no estaba entre los prioritarios. En esta misma línea, Ciudadanos ha presentado una Proposición no de Ley en el Parlamento para exigir a la Consejería que siga la estrategia de vacunación publicada el 18 de diciembre por parte del Consejo Interterritorial de Sanidad, en la que se establecen las preferencias de los grupos de población que «hay que ir vacunando, que no son otros que las personas mayores de las residencias».

«El Gobierno de Cantabria está gritando a los cuatro vientos que estamos ya a la cabeza en vacunación, pero esto se está haciendo a costa de no proteger a nuestros mayores ni al personal de las residencias», aseveró Álvarez, que calificó de «caos y temeridad» la situación generada por el bipartito PRC-PSOE. En su opinión, «es la cuestión más grave de esta legislatura».

Por su parte, a través de su iniciativa, Vox pedirá el apoyo del resto de grupos para que cualquier norma dictada por el Gobierno de Cantabria, independientemente de su rango, y que «suponga una limitación de los derechos y libertades de los ciudadanos», venga acompañada de la publicación de los informes técnico-sanitarios que avalen dicha orden.

Para su portavoz, Cristóbal Palacio, la gestión llevada a cabo hasta ahora «adolece de demasiadas sombras y ha quedado evidenciado en varias ocasiones que las restricciones sociales y de movilidad decretadas en los últimos meses no se han basado en criterios de salud. Ya no podemos fiarnos de un Ejecutivo que nos ha engañado sistemáticamente».

También Izquierda Unida considera que «ha llegado el momento de cambiar el mando» en la Consejería para «acabar con los bandazos e improvisaciones». Su coordinador autonómico, Israel Ruiz Salmón, plantea que haya un recambio al frente de Sanidad «que permita devolver estabilidad, rigor y criterio coherente a las decisiones y actuaciones en materia sanitaria y de salud pública». «Una semana después, el consejero Miguel Rodríguez sigue sin explicar los cambios en su área», lamenta.