«El respaldo de la afición no nos hace invencibles, pero sí imparables»

Para el partido del domingo Romo podría contar con dos bajas, las de Bobadilla y Fausto Tienza, ambos con molestias musculares, pero el técnico no quiere dar por perdido a ninguno de los dos. En la sesión matinal, el mediocentro participó con el resto de sus compañeros, mientras que el central se ejercitó al margen del grupo. «Vamos a esperar hasta el último momento. Parece que está más cerca Fausto que Bobadilla, pero vamos a esperar al entrenamiento de mañana», avanzó Romo.

El madrileño ya tiene clara cuál es la base del equipo y en los últimos ocho partidos ha dado la titularidad a ocho jugadores de forma invariable. «Es la base de la plantilla. Si no creo que hubiéramos tenido que retocar algo más. A partir de ahí hay partidos para todos, hay momentos, hay lesiones, hay sanciones... pero la base no podemos modificarla ahora», explicó. Lo que sí intenta cambiar son «actitudes individuales», ya que eso a juicio de Romo ayuda a ser más eficiente y hace que él elija a un futbolista por delante de un compañero. «Las dinámicas positivas vienen también por poder ganar a algún rival que te puede dar un poquito más de confianza. Esas actitudes individuales son lo que pueden hacer que me decida por uno u otro jugador, pero la base, lo vemos todos, es que hay seis, siete, ocho jugadores que se han ido repitiendo en las jornadas que se han jugado».

Uno de esos futbolistas recurrentes en el once del Racing es Iñigo Sainz-Maza. El canterano se ha ganado a pulso su lugar en el equipo. Aunque con Romo empezó como suplente, pronto se hizo con una plaza fija en las alineaciones del técnico. Y es debido a su evolución. Si antes parecía que era el jugador defensivo, ahora rompe líneas y lleva el balón al campo rival. A Romo no le sorprende su evolución. «Tiene voluntad, se ven las ganas que tiene de ser futbolista, de ir mejorando, y tiene que ver mucho lo joven que es y el poco tiempo que lleva jugando en esa posición de mediocentro», comentó Romo. Y es que cuando el madrileño llegó al Racing como coordinador de las secciones inferiores fue el encargado de realizar el primer contrato al de Ampuero, que entonces jugaba de lateral derecho. «Ese cambio que surgió de posición hace dos años y el año pasado se afianzó en el primer equipo, eso nos tiene que hacer ver que él también está dando pasos importantes y rápido. Lo está haciendo muy bien», señaló. Y explicó que no le sorprende porque el canterano «es un chico extraordinario y con una voluntad muy buena. Él complementa muy bien a todos y está consiguiendo no solo eso, sino que los demás le hagan a él poderse soltar».

También habló sobre Cedric y Arturo Molina. El propio Romo aseguró tiempo atrás que el nigeriano era el delantero de este equipo y aunque ahora lleva meses sin marcar, el entrenador no se desdice. «Las rachas de los delanteros ya sabemos cómo son. Un día que no la meten... El propio Cedric en la segunda vuelta el año pasado tuvo una racha espectacular. Tengo confianza en ellos, que no se rallen, que sigan jugando, porque si no mete goles tiene que hacer muchas otras cosas por el equipo y él está en esa línea», decía quitando hierro al asunto de la sequía goleadora del nigeriano. Por su parte, Molina ha sido titular en los últimos tres partidos. La llegada del murciano parece que ha aportado más presencia en campo contrario. «Es un perfil diferente, pero tiene que ver también con los que juegan a su lado. Si lo juntamos con Pablo y se encuentran, si somos capaces de que él aparezca cambiado de banda, como el día de Coruña y pueda ayudaros en algunas situaciones, pero sin cambiar la base del equipo, sí porta eso», reconoció el técnico. Que no escatimó en elogios hacia el jugador. «El otro día en Salamanca nos dio envío porque tiene muy buen golpeo. Él más allá de su perfil lo está haciendo bien igual que si entra Soko, Camus Bustos, que seguiríamos siendo un equipo más lineal, pero dentro de esa evolución hemos mejorado mucho esas relaciones».

Lo que no percibe el técnico son unas ganas especiales de competir contra el Dépor en la carrera por el liderato de la Liga. No quiere reducir la temporada a una lucha de dos. «No especialmente, nosotros tenemos confianza y los demás rivales se siguen frotando las manos si lo reducimos a Dépor-Racing porque se han juntado todos. Hay que ganar muchos partidos para pelearlo. Estar ahí es significativo y con humildad, que eso no significa no tener ambición, para preparar cada partido». Lo que sí destaca de su equipo es la competitividad. Un rasgo con el que cree que sí cuenta el Racing, pero también el rival del domingo. «Competir bien es una virtud, pero lo hacen muchos equipos. El Real Unión lo hace. Aunque nosotros podamos destacar con unos números ellos son un equipo muy competitivo, porque para mí competir no es solo estar muy cerca de ganar los partidos, es tener mucha intención para ganarlos, es ese matiz», aseveró, aunque, claro, eso no siempre se consigue. Según el técnico los equipos le echan más ganas cuando se enfrentan al Racing. «Estoy harto de ver todos los partidos de la Liga y ver que cuando los equipos se enfrentan contra nosotros tienen otros comportamientos, no digo que sean mejores ni peores, pero hay otra motivación, el venir a El Sardinero, enfrentarte a nuestra institución... esas cosas hacen que los demás aumenten un poco ese nivel competitivo».

Por eso el ambiente de los Campos de Sport este fin de semana puede ser determinante y ayudar al equipo a romper la estadística del Real Unión fuera de casa. Con 2.300 entradas vendidas para este partido y tras celebrar el cumpleaños de la institución, el mensaje que Romo lanza a los aficionados es de convertir El Sardinero en una olla a presión. «Cuando tenemos el respaldo de la afición te ayuda mucho, no nos hace invencibles, pero sí nos hace imparables. Ojalá se animen y podamos dedicarles un triunfo», confesaba el técnico que también quiso agradecer a los fieles verdiblancos todo su apoyo. «Nosotros intentaremos estar siempre a la altura de lo que ellos consideren que es un buen equipo, más allá de que ganemos que nos vean el esfuerzo, la intención... eso que no nos falte».