Quiñones anuncia 73 millones para el AVE y culpa a Torrelavega de la ausencia del soterramiento

En resumen, Quiñones aclaró que la alta velocidad Santander-Madrid tendrá el año que viene 73 millones de euros –65 estaban 'ocultos' bajo la partida genérica del Mecanismo de Recuperación– y que la integración de la capital del Besaya no aparecía en el documento porque los propios cambios impulsados por el equipo de Gobierno de Torrelavega en el proyecto obligan a rediseñarlo parcialmente. Eso, de rebote, retrasará todo el calendario e impedirá que la actuación se inicie en 2022. «Son reales y viables», apuntó la delegada tras explicar que Hacienda sólo incluye partidas que se puedan ejecutar, no aquellas que ya se sabe que se quedarán en el cajón. En cualquier caso, «que no haya una partida no implica que el Gobierno de España no tenga una apuesta clara por el soterramiento».

La delegada se refiere a la inclusión dentro de dicho proyecto de un aparcamiento subterráneo y un nuevo sistema de drenaje, cambios sustanciales que quizás obliguen incluso a realizar una nueva evaluación ambiental. A partir de ahí, cualquier licitación de la obra no llevará menos de un año. Una explicación que no le sirve al regidor, que subraya que Quiñones no dice toda la verdad. «No hay por donde justificar lo injustificable. Hay un convenio firmado y se tiene que cumplir», defendía, Javier López Estrada (PRC), que incluso amenazaba al Estado de ir a los tribunales por lo que entendía que es un incumplimiento del convenio para la ejecución de la obra.

Así, la falta de dinero para el soterramiento de las vías a su paso por Torrelavega no es un «olvido», como deseaba el presidente regional, Miguel Ángel Revilla, a primera hora. Todo lo contrario, es algo totalmente intencionado. «Hay luces y sombras. Es mejor que el del año pasado, pero tiene carencias incomprensibles», afirmaba el regionalista, que condicionaba el voto favorable del PRC a los Presupuestos en el Congreso de los Diputados a que se corrigieran esos dos asuntos: la inclusión en el documento de la integración ferroviaria y el aumento de las partidas para el AVE, un punto que también extrañaba a Pablo Zuloaga. El vicepresidente se felicitada por la llegada de los compromisos del Estado por Cantabria, pero también reconocía que en lo relativo a la alta velocidad las partidas se habían quedado «un poco cojas».

Sobre el primer asunto parece que el Gobierno de España, tras las explicaciones de este jueves de Quiñones, no tiene intención de dar marcha atrás. Y sobre el AVE no lo hará porque las cifras que manejaban Revilla, Zuloaga y Mazón –y todos los que desde el miércoles hasta la comparecencia de este jueves de Quiñones han revisado el Presupuesto– no son las correctas. En el documento, en el apartado de las inversiones de Transportes en Cantabria, figuraban los famosos 7,8 millones de euros bajo la denominación de «Línea de Alta Velocidad a Cantabria», pero los 65,2 restantes estaban 'escondidos' en el pack de «Otras actuaciones». Así que, de los dos agravios que contabilizaba el PRC, parece que uno ya está resuelto.

La líder de la oposición, María José Sáenz de Buruaga, ya dijo el miércoles que, para el PP, «el Presupuesto de 2022 certifica la inutilidad del pacto del PRC con Sánchez. Este jueves, Cs y Vox siguieron la misma línea. «Entre la indiferencia del Gobierno de Sánchez y el teatro del PRC, estos presupuestos son una zancadilla para el futuro de Cantabria», apuntó el coordinador naranja, Félix Álvarez, que avanzó que las cuentas nacionales «no impulsan con decisión los grandes proyectos para Cantabria»: «Tan sólo mantienen una inercia cansina que sigue alargando los plazos para que podamos verlos hechos realidad».

Para Vox, las Cuentas son «una mala broma con un resultado desolador» para la región ya que «no contemplan una inversión real para Cantabria». En opinión de su portavoz, Cristóbal Palacio, retratan a Revilla y a su Gobierno «con los mismos incumplimientos históricos de sus promesas electorales».

Frente a todo lo anterior, y especialmente ante las críticas del PP, Quiñones quiso destacar que el Gobierno de Pedro Sánchez ha invertido en Cantabria en cuatro años un 28% más que Rajoy en sus últimos cuatro años.