Revilla sobre Gochicoa: «Si pongo la mano en el fuego por alguien es por este consejero»

«El caso de un solo funcionario no puede empañar el trabajo que ejercen diariamente de forma honesta los otros 25.000 funcionarios que tiene la Administración Pública en Cantabria», recalcó Revilla, que insistió en que es una «lástima» que «la ambición pueda con estas personas, que tienen resuelta la vida, y son capaces de quemar toda una trayectoria y dañar la imagen de su familia. Es terrible». «Que caiga sobre los responsables todo el peso de la ley», insistió el presidente.

Fueron todas declaraciones realizadas a las once y media de la mañana, cuando aún no se había hecho público el sumario de la investigación, algo que llegó por la tarde. «Estamos deseando saber qué ha ocurrido exactamente y nos hemos personado como acusación particular porque el Gobierno de Cantabria es el principal afectado por esto», aseguró el presidente, que no se contuvo a la hora de cargar contra quienes están detrás de este caso de corrupción en torno a la licitación de contratos del Servicio de Mantenimiento de Carreteras.

«Peor que un ladrón»

«El que roba en el ámbito privado es un ladrón, pero el que roba en lo público es mucho peor», continuó Revilla, que insistió en que nada hacía presagiar que el alto funcionario público estuviera actuando de esta manera ilícita. «En estas circunstancias, cuando hay tanta gente trabajando en la Administración y cuando se firman tantos contratos, puede surgir un caso como este y es difícil identificarlo; por eso lo que deseamos es que se depuren todas las responsabilidades y que en el caso de que se confirme todo lo que ha pasado, que caiga todo el peso de la ley sobre los responsables de estos actos terribles».

El presidente recordó el «desasosiego» que se generó el miércoles en todo el Gobierno, cuando se efectuaron todos los registros y las detenciones. «Hay muchos trabajadores a los que todo lo sucedido les ha generado un profundo malestar y me preocupa porque la inmensa mayoría de los realizan un trabajo extraordinario con vocación de servicio público. No se merecen esto».