Sanidad admite retrasos en las altas de los hospitales por el conflicto de Ambuibérica

Este pasado miércoles, el consejero de Sanidad, Raúl Pesquera, y otros responsables de su departamento, entre ellos el propio Sotoca, mantuvieron un encuentro con los representantes sindicales de la empresa para trasladarles su visión del conflicto tras el anuncio realizado la semana pasada por parte de Ambuibérica a los trabajadores de que va a proceder a iniciar la tramitación legal de descuelgue salarial e inaplicación del convenio colectivo del sector.

Los representantes de los trabajadores trasladaron al consejero el impago por parte de Ambuibérica de la paga extraordinaria, situación incursa en el proceso de descuelgue salarial y que va a suponer el inicio de un conflicto laboral inminente.

Sin embargo, ese desencuentro ya está teniendo sus consecuencias en medio de una octava ola de covid que ya se ha cobrado 24 muertes en un mes y que ha deja producido 360 bajas entre la plantilla de sanitarios. «La maquina está tensionada, tanto en Atención Primaria como en los tres hospitales, y es necesario que todos los servicios funcionen como un reloj, incluido el servicio de ambulancias, y no está siendo así», apunta el gerente del SCS. «Hay retrasos en las altas y en el traslado de pacientes desde Urgencias a sus domicilios, lo que hace que los pacientes sufran demoras innecesarias e inmerecidas».

Sotoca considera que los pacientes y los trabajadores no deben sufrir un problema que es de la empresa, que «lo que tiene que hacer es cumplir el contrato». También entiende que la empresa tenga a muchos trabajadores en situación de baja por covid, «pero tiene capacidad para contratar más». «No puedes tener a un paciente esperando a una ambulancia, sobre todo cuando está contratada. Ambuibérica tiene que responder igual que lo está haciendo el personal de Sanidad, que está dando altas y bajas en julio como un mes normal», insiste.

El sindicato USO, con amplia representación en la empresa, señaló ayer que lo que les trasladó Sotoca en la reunión es que la situación es «dramática» ya que «hay personas que no pueden ser dadas de alta en los hospitales por falta de servicios». Además, USO cree que la solución al conflicto con Ambuibérica pasa por «la inmediata publicación del nuevo pliego». Además, reclamó que, de seguir el incumplimiento por parte de la firma, se proceda de manera inmediata a la rescisión del contrato y se inicie urgentemente la adjudicación a una nueva empresa. Aunque Sanidad no es algo que se plantee a corto plazo.

Por su parte, Ambuibérica dice que, después de meses de negociación, «el conflicto se ha agravado ante la falta de perspectivas de ese nuevo concurso que recoja un convenio nuevo, como es deseo de las partes». «Trabajamos con todos nuestros recursos para intentar que el conflicto afecte lo menos posible al servicio y, en especial, a los pacientes, destinatarios últimos del mismo».

La octava ola, cuyo comienzo Salud Pública señala el 14 de junio –cuando la incidencia invirtió la tendencia–, se cobró este pasado miércoles cuatro nuevas víctimas en Cantabria, con lo que son ya 24 las personas que han fallecido como consecuencia de la variante BA.5 de Ómicron. Frente a este goteo incesante de fallecimientos (que colocan la cifra global en 934), el lado positivo es que se ha detenido el ascenso de la incidencia a 14 días por vez primera desde el pasado 20 de junio. Esto podría indicar que se ha llegado al pico de contagios de esta ola.