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Los 164 maestros en prácticas, en el salón de actos del IES Villajunco, en Santander, donde recibieron la primera de sus sesiones formativas. Javier Cotera
Un último «esfuerzo» para ser maestro

Un último «esfuerzo» para ser maestro

A prueba ·

Los 164 docentes que aprobaron las oposiciones inician la formación de su año de prácticas

Mada Martínez

Santander

Miércoles, 5 de octubre 2022, 14:35

Cuando Noelia del Álamo Buendía vio el nombre de Ángela Botín Carrera en las listas de aprobados de la oposición de Infantil y Primaria celebrada el pasado junio se llevó una alegría enorme. A su compañera le ocurrió lo mismo. Ambas lo habían logrado después de varios intentos, en el caso de Ángela incluso fuera de Cantabria.

«Nos alegramos mucho la una por la otra. Ahí ves que tanto esfuerzo da resultados», contaban ayer a las puertas del IES Villajunco de Santander, donde asistieron a la primera sesión formativa de su año como maestras en prácticas. Porque, tras superar las pruebas y obtener un buen baremo, a ellas y a sus compañeros de oposición les queda ese último «esfuerzo» antes de convertirse en funcionarios de pleno derecho del sistema público cántabro.

Ese paso final consiste en un periodo de prácticas de al menos seis meses, que es obligatorio superar y que pasa por un curso de formación con varias sesiones presenciales y online -sobre cuestiones legislativas, competenciales, curriculares...-, la composición de un trabajo centrado en una situación de aprendizaje y el desarrollo a pie de aula de sus capacidades como maestros. Lo harán bajo supervisión, con el apoyo de un tutor, del director del centro y del servicio de Inspección de la Consejería de Educación y FP.

«Todavía no nos lo creemos, no somos conscientes de que lo hemos conseguido»

Ruth López y Aída Pérez | Maestras

«Os queda solo un poco más»

«No dudéis en preguntar, en pedir ayuda», les animó ayer Mercedes García, directora general de Innovación e Inspección Educativa, que dio la bienvenida a estos 164 maestros en prácticas de siete especialidades (Infantil, Primaria, Inglés, Educación Física, Música, Pedagogía Terapéutica y Audición y Lenguaje), así como del cuerpo de profesores de Música y Artes escénicas (Fundamentos de Composición, Lenguaje Musical y Tuba).

«Seguid caminando, compartidlo todo con vuestros compañeros. Os queda solo un poco más», les recordó García.

En busca de seguridad

Noelia y Ángela ya trabajan en sus aulas desde el 1 de septiembre. Lo hacen «contentísimas», también porque el recibimiento en sus colegios, el Valle del Nansa (Puentensa) y el Portus Blendium (Suances), respectivamente, ha sido entusiasta. Atrás quedan meses abrumadores, en los que han hecho compatibles el estudio y el trabajo, en los que trataban de sacudirse la incertidumbre que traen los nuevos procesos de estabilización de interinos y en los que han sorteado, a base de codos, los cambios de leyes.

«No dudéis en preguntar y pedir ayuda. Seguid caminando y compartidlo todo con los compañeros. Os queda un poco más»

Mercedes García | Directora general de Innovación e Inspección

Ahora les queda el último estirón. Lo afrontan con ánimo y también con ganas de darle carpetazo. «Estamos deseando que acabe este proceso para poder decir de una vez: ya está, ya tengo mi plaza», coinciden.

Ruth López Pereda y Aída Pérez Soberón compartían una sensación parecida. Con un par de cafés en la mano esperaban en la entrada del Villajunco el comienzo de una sesión formativa que ayer giró en torno a la recién estrenada Lomloe. Maestras vocacionales -en parte gracias al ejemplo inspirador de sus madres, «que nos han animado mucho y sin las que esto no hubiera sido posible»-, ambas trabajaron duro para sacarse las oposiciones en una convocatoria en la que era más crucial que nunca tener «buena nota -en las pruebas- y buenos puntos» en la fase de baremación, entre otras cosas porque la competencia era alta: 4.210 aspirantes se presentaron finalmente a la convocatoria.

Tras un verano de «espera e incertidumbre», porque las listas oficiales se demoraron bastante en salir, ya tienen casi todo el camino andado -«todavía no nos lo creemos, no somos conscientes de que lo hemos conseguido»-, y están listas para afrontar este curso en prácticas. Solo si las superan serán nombradas funcionarias y eso impone. Es una «presión» añadida, admite Ruth, «y hasta que no acabe este proceso de prácticas no tenemos una seguridad absoluta».

Les reconforta el ambiente de compañerismo en los colegios en los que pondrán a prueba sus competencias, los CEIP Cuevas del Castillo (Vargas) y Estela de Zurita (Piélagos). «Estamos encantadas. La acogida de los compañeros ha sido buenísima», celebra Aída.

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