Secciones
Servicios
Destacamos
Los lectores seguramente conozcan a José Bono, aunque el nombre les lleve al expresidente de Castilla La Mancha; exministro de Defensa y expresidente del Congreso de los Diputados. Ese no es. El José Bono que abre esta crónica quizá les suene más por su apodo: ... la calculadora humana. O por su inconfundible aspecto, calvo con melena, como Jorge Gonçalves, pero menos surfero. Es probable que le hayan visto alguna vez en televisión. Realizando cuentas infinitas, moviendo el bolígrafo agitadamente de forma vertical frente a una pizarra llena de números en medio de un murmullo ininteligible y mucho menos reproducible. Así andaban este domingo los racinguistas desde el mediodía. Echando humos por la cocorota. Que si el Bilbao Athletic. Que si el Real Unión. Que si la Real Sociedad B. El Amorebieta en el sofá de casa... Todos ellos cumplieron con lo que necesitaba el Racing. Menos el propio Racing. El equipo de Aritz Solabarrieta emborronó todas las cuentas. Y el papel, al final, a la papelera. El hecho de no ganar este domingo, en los Campos de Sport, al Arenas, es la punta del iceberg. El pico de hielo de una primera fase de la temporada paupérrima. Tanto, que esta ya se puede considerar como la peor campaña deportiva de los 108 años de historia del club. Y eso que era difícil de superar por abajo aquel desastroso quinto puesto de la 2017-18. Ahora ya sólo queda evitar hacer el ridículo. Pelear por no descender. Porque la futura Primera RFEF es la permanencia y la Segunda, un descenso con mayúsculas.
Lo reconocía el presidente del Racing, Alfredo Pérez, en aquella rueda de prensa inservible al día siguiente de la derrota frente al Real Unión, en El Sardinero. La tercera consecutiva de la era Solabarrieta. «El objetivo de la Primera RFEF es innegociable», dijo el mandatario. De momento, lo único seguro es que el equipo verdiblanco no regresará esta temporada al fútbol profesional. Otros clubes con menor presupuesto e historia, como el Amorebieta, el Zamora o el Calahorra ocuparán un puesto que, allá por octubre, parecía destinado al conjunto cántabro. Y sí, eso es un fracaso. De grandes dimensiones, además.
El Bilbao Athletic cayó ante el Sanse y el Real Unión se marchó escaldado de Portugalete. Si el Racing era capaz de ganar al Arenas, en casa, y en la última jornada en Amorebieta, prácticamente tenía asegurado meterse en el podio cabecero. Después de una trayectoria pobre, podía ser un logro. Pero el equipo de Solabarrieta volvió a mostrar su peor imagen en el momento decisivo para mandarlo todo definitivamente al garete. Mira que el racinguismo lo último que pierde es la fe y este domingo acudió a los Campos de Sport con toda la ilusión del mundo. Pese a lo poco que ha recibido esta campaña. Y, ¿para qué fue? Para llevarse el enésimo sopapo de los últimos años.
El fracaso consumado este domingo, aunque el racinguismo se negase a hacerlo, se veía venir. La apuesta por José Mari Amorrortu como responsable de estrategia deportiva ha resultado fallida. La idiosincrasia y urgencias de un club como el Racing distan bastante del trabajo diario en la prolífica cantera de Lezama. Así ha pasado lo que ha pasado. Por una mala planificación ya desde el pandémico verano pasado. La apuesta por la cantera era necesaria e irreprochable, pero hasta enero los chavales prácticamente se han visto solos en la batalla. Porque los primeros fichajes, salvo Álvaro Bustos y un Soko al que los técnicos le dieron cuerda tarde, no han estado a la altura. Y cuando se ha querido solventar la papeleta en el mercado invernal, las llegadas de Riki e Isma López -ya con el secretario técnico, Pedro Menéndez, como hombre fuerte en las compras- han aumentado el nivel de la plantilla -además de la aportación del psicólogo, José Miguel Manzanares-, pero los daños ya eran irreparables. No hace falta decir que las otras tres incorporaciones de la última ventana, Capanni, Traver y Gerson aún no han aportado gran cosa.
Noticias Relacionadas
Sergio Herrero Marcos Menocal Borja Cavia
Marcos Menocal
Javier Menéndez Llamazares
Además, por las erróneas elecciones de los entrenadores. Primero, la de un Javi Rozada cuya figura quemó la decisión del club de mantenerle quince días en barbecho cuando ya había sido elegido. Y después, cuando el asturiano fue destituido -un hecho que puede ser opinable- para colocar en el banquillo racinguista a un técnico con una escasísima experiencia por ser el protegido del propio Amorrortu. A los resultados hay que remitirse.
Además, un Rozada que se vio solo en La Albericia ante la imposición del club de no contratar un segundo técnico, lo único que hizo fue dar bandazos tácticos en una plantilla que tampoco puso mucho de su parte, más allá de las ganas de los canteranos. Al lastre liguero, en su haber, hay que agregarle la eliminación copera en el campo de la Mutilvera. Todo eso y las tres derrotas consecutivas desde que el desconocido Solabarrieta llegó a Santander se convirtieron en un muro demasiado alto que el técnico y su equipo, ni siquiera con los fichajes, han sido capaces de saltar.
Ahora hay que ver si, además de la debacle deportiva, que no es poco, la situación tiene otras consecuencias. Amorrortu logró mantener a Solabarrieta en el cargo tras los esperpentos de sus tres primeros encuentros como entrenador. Después de este primer fracaso de la temporada, en busca de un objetivo «innegociable» y con el responsable de estrategia deportiva que ha perdido una importante cuota de credibilidad, en las oficinas de los Campos de Sport deberán decidir si merece la pena mantener al técnico al frente o buscar un nuevo líder que devuelva el rumbo al barco.
Al proyecto verdiblanco de esta temporada, en parte, lo salva la pandemia. El hecho de que el estadio verdiblanco luzca más asientos y hormigón que gargantas y bufandas ha disminuido de forma ostensible la presión ambiental. Sin embargo, este domingo con cerca de 4.000 espectadores en las gradas, un gran sector de la platea mostró su desencanto e incluso mosqueo con el devenir racinguista.
Seguro que la parroquia verdiblanca, incluso para el choque definitivo de la primera fase frente al Amorebieta, recupera parte de la ilusión perdida. Es la virtud -o el defecto- del racinguismo. Y a poco que dé el equipo en la segunda fase, la afición se enganchará de nuevo. Pero a partir de ahora al Racing le toca pelear por el premio de consolación, aunque la verdadera responsabilidad de su equipo y de los que lo gestionan es no hacer el mayor ridículo de la historia del club. Porque además del sonrojo, podría suponer un durísimo varapalo para la viabilidad del Racing.
Seguramente ya tenían trabajo adelantado, pero desde ayer en el Racing se tienen que fijar únicamente en el otro subgrupo: el 2B. Con el que se cruzarán los verdiblancos de cara a la segunda fase de la competición, en busca de una de las plazas de repesca para la futura Primera RFEF. La que será la tercera categoría del fútbol nacional.
El equipo cántabro necesita ocupar una de las dos primeras plazas en una liguilla de siete equipos, a la que arrastrará los puntos cosechados hasta ahora en forma de coeficiente, ya que en el subgrupo 2B sólo había encuadrados diez equipos, por los once del 2A. Allí estará, entre otros, con el Laredo, aunque verdiblancos y pejinos no se enfrentarán entre ellos al haberlo hecho en la primera fase. Tampoco se verá las caras con el Arenas ni con el cuarto clasificado, aún por dilucidar –Real Unión o Bilbao Athletic–.
Aunque el subgrupo 2B, formado por equipos navarros, riojanos y aragoneses, tenía ayer su última jornada, un brote de covid en el Haro ha llevado a la Federación a aplazar todos los choques de la jornada unificada, salvo el que enfrentaba a Tudelano y Calahorra, que se jugaban entre ellos el primer y el segundo puesto. Los tres rivales del Racing saldrán de entre Sociedad Deportiva Logroñés, Ebro, Mutilvera, Osasuna B, Tarazona y Ejea.
El equipo cántabro se enfrentará, a ida y vuelta, con los tres clubes clasificados, por lo que dentro de siete jornadas –el choque ante el Amorebieta y los seis de la segunda fase– la temporada habrá finalizado para el Racing. Allá por mediados de mayo.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.