

Secciones
Servicios
Destacamos
Donald Trump es experto en sorprender con sus declaraciones. Lo hizo otra vez hace unos días -y seguro que no será la última- cuando atacó ... sin piedad al presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, a quien dirigió un mensaje en su red, Truth Social, cargado de mala leche. En la primera frase ya le calificaba de «comediante de modesto éxito» pero, a medida que tecleaba, el inquilino de la Casa Blanca elevó el tono hasta acusarle finalmente de ser un «dictador» por no convocar elecciones. El comentario dio la vuelta al mundo. Millones de personas lo leyeron. Pero el magnate lo ha borrado de su cabeza. «¿Dije eso?», soltó el jueves cuestionado por la prensa. «No puedo creer que lo dijera. Siguiente pregunta», zanjó.
No es casualidad que a Trump le haya fallado la memoria justo el día antes de que Zelenski pase por la Casa Blanca para sellar el acuerdo para la explotación de las tierras raras que hay en la antigua república soviética. De hecho, como hombre de negocios que es, el presidente de Estados Unidos sólo tuvo buenas palabras el jueves hacia su homólogo ucraniano, por quien dijo sentir «mucho respeto». Incluso alabó la «valentía» de sus tropas ante la invasión rusa iniciada hace tres años. El cambio de tono es evidente. La reunión entre ambos parece que será más agradable que lo que habría resultado hace una semana, cuando el líder republicano hizo al ucraniano prácticamente responsable de tener a su país «devastado» por la guerra.
El acuerdo que se cerrará este viernes, salvo sorpresa, interesa a ambas partes, aunque Kiev no haya conseguido el compromiso de protección por parte de Washington que ansiaba. El pacto funciona en sí mismo como «una red de seguridad» para Ucrania, sostiene Trump, quien está convencido de que «nadie va a meterse en problemas si estamos (EE UU) con muchos trabajadores» en el país europeo. El magnate tampoco ha logrado incluir todas sus peticiones en el documento final -como una mención expresa a una cantidad (500.000 millones) de negocio- aunque los estadounidenses tendrán acceso a los recursos del subsuelo ucraniano en compensación por la ayuda militar y financiera aportada desde el inicio de la guerra.
El inquilino de la Casa Blanca dejó claro el jueves sus planes para Ucrania: «Vamos a cavar, cavar, cavar». No será sencillo, pese al acuerdo, ya que la mayoría de los minerales que contienen las tierras raras del país -un filón para el sector tecnológico- está sin explotar, resulta difícil de extraer o se encuentra bajo control ruso en territorios ocupados. «Intentaremos recuperar tanto como sea posible», aseguró Trump, que abrió la vía a una posible negociación de paz hace unas semanas con una llamada de teléfono al presidente ruso, Vladímir Putin. Un asunto que estará también este viernes presente en la cita que los mandatarios estadounidense y ucraniano mantendrán en el Despacho Oval.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.