Ciudadanos apuesta por una gestora continuista con «el legado de Rivera»

Este continuísmo con la anterior etapa se refleja en los nombres de los 16 miembros que integran la gestora, de los que 10 pertenecen a la ejecutiva de la anterior dirección de Rivera. Entre ellos el propio Villegas o Fran Hervías, que esta semana anunció su dimisión, aunque asumirá el cargo de responsable de organización mientras dure el periodo de transición.

Sin embargo, también se ha abierto una pequeña puerta a los críticos, como desmuestra la presencia del europarlamentario naranja Luis Garicano, ahora responsable de Asuntos Internacionales, que el verano pasado sumó su voz a la de otros díscolos como Toni Roldán, que abandonó el partido en junio en contra del cordón sanitario impuesto al PSOE y el acercamiento de Ciudadanos a Vox en la estrategia de pactos electorales. Su presencia contrasta con la ausencia en la gestora de fichajes personales de Rivera como, por ejemplo, Marcos de Quinto, Edmundo Bal o Sara Jiménez.

También se ha aprobado el Reglamento de la Comisión Gestora, que ahora sí da poderes para modificar los estatutos en un caso de urgencia, como podría serlo una nueva repetición electoral. Desde Ciudadanos afirman que se trabajará «con ilusión» en un proceso «ordenado de transición que será plenamente participativo» y en el que «se dará voz a todas las propuestas que se presenten», tal y como explicó García Bofill.

El presidente del Consejo General de Ciudadanos reivindicó «el legado de Albert Rivera» y destacó que «solo Ciudadanos puede traer a España políticas centradas, liberales, que apoyen a las familias, a los autónomos, que planten cara al nacionalismo y que avancen hacia la regeneración democrática».

Además de regir el destino del partido durante los siguientes cuatro meses, la gestora deberá tomar la importante decisión de cómo orientar el voto de los diez diputados del partido en la investidura de Pedro Sánchez. La portavoz de Ciudadanos en el Congreso, Inés Arrimadas, insiste en un acuerdo entre «constitucionalistas», es decir, entre PSOE, PP y su partido, lo que puede servir de pista para indicar que la postura de los naranjas no va a moverse del 'no' si los socialistas siguen insistiendo en buscar la abstención de ERC.

Precisamente Arrimadas, que no ha entrado en la gestora para evitar favoritismos en la carrera por la sucesión de Rivera, es el nombre que suena con más fuerza para tomar las riendas de Ciudadanos cuando se elija al nuevo líder de la formación la próxima primavera.