Los argayos de Cabuérniga y de Cieza se estabilizarán hoy

El primero, consolidado en parte el mismo sábado, permitió abrir la circulación a uno de los carriles del vial, puesto que es la única conexión que existe entre ambas localidades. «Hemos tenido suerte y ha dejado de caer material de la montaña», informó ayer el alcalde de Cabuérniga, el socialista Nicolás Toral, que durante parte de la noche del sábado, cuando se produjo el incidente, estuvo supervisando el control del tráfico.

«Por suerte nos han dejado uno de los carriles abiertos y ha podido seguir la circulación porque en fin de semana hay mucha gente que sube a comer el cocido a Cabuérniga y un corte total nos hubiera hecho un trastorno importante», razonó. Desde el consistorio se espera que a partir de este lunes comiencen los trabajos para estabilizar el talud.

En el segundo caso, la N-611 está cerrada en el punto kilométrico 167, a la altura de la Media Hoz, entre Los Corrales de Buelna y Arenas de Iguña. Desde mantenimiento se carreteras se aclaró que este lunes comenzarán los trabajos para limpiar el vial, que por otro lado no ha cortado el acceso a ninguna población porque para llegar a Villasuso de Cieza, la población más cercana, existen alternativas desde Los Corrales de Buelna, a través de la Autovía de la Meseta.

De menor entidad resultó el desprendimiento de tierra producido este domingo en el carril bici de acceso al parque de la Viesca desde la subida de Cartes. Allí los operarios municipales y los bomberos despejaron el vial, donde cayó tierra y material vegetal.

Por otro lado, algunos vecinos que padecieron inundaciones el pasado sábado hacen balance de daños. Uno de esos casos fue el del polígono La Tejera, en Castro Urdiales. Allí el agua anegó algunos garajes, locales y empresas, echando a perder el género guardado en los almacenes. Por suerte la predicción de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) se cumplió y las lluvias amainaron este domingo para dejar paso a un drenaje natural que ayudó a la vuelta a la normalidad.