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La sirena de la venta sonando una y otra vez, y otra vez, no deja lugar a dudas. La actividad en el puerto de Santoña es frenética. La dársena se queda pequeña para acoger al sinfín de embarcaciones que atracan con sus bodegas a rebosar ... de cajas con bocartes. Este martes y este miércoles han sido «días de batalla». Por la báscula de la Cofradía de Pescadores Virgen del Puerto han pasado un millón de kilos del llamado tesoro del Cantábrico. «Esto es vida para nosotros y para el pueblo», ha aseverado el patrón mayor del cabildo, Miguel Fernández, tras presenciar una de las subastas.
La costera de primavera atraviesa estas jornadas su cenit. Ayer desde las siete la mañana hasta caer la tarde se vendieron 600.000 kilos de bocarte en la lonja santoñesa. El récord de lo que va de campaña. «Ha sido nuestro día más fuerte hasta el momento». Este miércoles se han despachado cerca de 400.000 kilos. Pero ahí no se quedan las cifras. Hay más. El viernes de la semana pasada ya se vivió un augurio de lo que estaba por venir con otros 200.000 kilos. Y este mismo lunes, a pesar de ser festivo, los marineros trabajaron a destajo para descargar otros 200.000 kilos de anchoa. Fernández calcula que el puerto puede cerrar la semana alcanzando el millón y medio.
Lo más positivo de esta avalancha de bocarte es que la practica totalidad de la flota está registrando capturas. Sin embargo, el tamaño de los ejemplares es algo menor que las semanas precedentes cuando solo algunos pesqueros tuvieron afortunadas echadas. En abril se ha pescado un bocarte de 26 a 32 granos (o unidades por kilo), magnífico para la conserveras. Fernández lo califica de «muy especial». Su precio medio fue de 3,37 euros. Lo que está entrando estos días se mueve entre los 32 y 43 granos. Un poco más pequeño, «aunque en ningún caso es malo», que tiene salida, tanto para las fábricas como para fresco. Su cotización media ayer descendió a 2,04 euros. «Aparte de que las fábricas están llenando ya sus almacenes, influye que es un pescado de más granos». Hoy, su precio ha seguido bajando hasta los 1,90 euros. «En muchos kilos, esos céntimos menos significan mucho dinero», ha señalado Fernández.
Las artes para capturar el ansiado cardumen se están echando entre Castro Urdiales y Cabo Mayor. Cerca de las costas de Cantabria. Por eso, hoy en el puerto de Santoña había barcos gallegos, asturianos, vascos y cántabros. Todos faenan por la zona sabedores de que es donde actualmente se concentra el bocarte. Una vez lo tienen a recaudo en sus bodegas toca volver a tierra. La mayoría de la flota se decanta por la lonja santoñesa para darle salida. «Nos eligen porque el puerto está preparado y porque aquí se concentran los compradores de las grandes superficies para fresco y de las conserveras, que las tenemos a las puertas de casa. Aquí el pescado se paga 30 o 40 céntimos más que en otros puertos. Somos una de las Cofradías referente en el norte». De hecho, de los 11 millones de kilos que se han subastado en las lonjas del Cantábrico, 3 millones se han lijado en el cabildo de Santoña.
Las tripulaciones este miércoles prácticamente se chocaban unas con otras en un ritual seguido a rajatabla. Descarga de las miles y miles de cajas verdes con el bocarte en su interior, traslado en las carretillas para su pesaje, subasta y embarque en los camiones. Así, cada barco. Una y otra vez. Algo después del mediodía el cerquero Manuel Padre Segundo, de Colindres, desembarcaba ya las últimas cajas. «Estos días son de trabajo a destajo, largando las redes día y noche», ha contado a pie de puerto el pescador José Luis Solana. «Nosotros lo hemos capturado a la altura de Machichaco. Están todos los barcos del este y los gallegos».
Genaro, patrón del barco Gamecho, con base en Santander, ha reconocido que al arranque de la costera ha sido «muy desigual». «Hasta la semana pasada era bocarte de muy buen tamaño pero no pescaban todos. Ayer y y hoy han pescado ya todos los barcos pero el bocarte es algo más pequeño y el precio ha empezado a bajar. A ver lo que aparece estos días porque cada jornada en la mar es diferente».
La flota ha consumido hasta ahora el 40% del Total Admisible de Capturas (TAC) previsto para este año de bocarte, que es de 30.180 toneladas.
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