¿Qué bebes tú con la hamburguesa?

-Hamburguesa con tomate, lechuga y cebolla. Los componentes vegetales, su frescura y la acidez del tomate inclinarían mis preferencias hacia un blanco fermentado en sus lías o con un corto tiempo de barrica; podría servirme alguno de los que actualmente se elaboran en Cantabria.

-Hamburguesa con bacon. La sal del tocino o la panceta van a aportar al conjunto la necesidad de un acompañante líquido con un volumen considerable; en esta ocasión me decanto por la cerveza, por una cerveza artesana de las muchas que tenemos por nuestra tierruca.

-Hamburguesa con queso de cabra. Los sabores lácticos y de levaduras del queso impregnarán a la carne unas particularidades ideales para combinar con un tinto joven y fresco de maceración carbónica.

-Hamburguesa con pepinillos y encurtidos. El poderío del vinagre en la boca me va a obligar a decantarme por una opción que quizás a algunos les resulte un poco escandalosa: yo esta hamburguesa la acompañaría sin rubor de una Coca-Cola.

-Hamburguesa con foie. Esta hamburguesa gourmet, elegante y de alto contenido graso, obligará a nuestro paladar a refugiarse en algún vino blanco y dulce con ciertos tintes aristocráticos: yo me quedo con un Sauternes o un Tokaji

-Hamburguesa con queso picón. La untuosidad y sabrosidad de este fantástico queso buscará su armonía perfecta con alguno de los Vinos del Sur…, un amontillado, un Palo Cortado o incluso un Pedro Ximénez cautivarán nuestros paladares acompañando esta recomendable combinación de queso, carne y pan. Si fuese verano, con calor, podría darle la mano también a una suculenta sidra escanciada.

Y a partir de aquí, queridos gastrolectores, ya sabéis, ¡a probar y a quedarse con lo que a uno más le guste!