«Todo lo que pasa estos días es una locura»

Premio y locura. En principio, es mejor título y más motivador e ilusionante que el de la novela de Fiódor Dostoyevski 'Crimen y castigo'. Nada que ver. Y es que para los tres protagonistas de este fin de semana copero el fútbol les ha traído como recompensa el frenesí. «Lo que está pasando estos días es una locura. Tal cual», señala en voz alta Carlos Cruz, el entrenador de un Velarde que vive patas arriba desde que el sorteo emparejó al equipo de Muriedas con el Sevilla.

«Es estresante. No estamos acostumbrados a la que se está montando en torno al partido». Ni los camargueses ni, por su puesto, sus paisanos de Vioño. Allí acicalan La Vidriera para recibir al Mirandés, un conjunto a quien la Copa del Rey, precisamente, le colocó en el foco y que ahora está consolidado en el fútbol profesional. «Esto es un premio;queríamos el Atlético de Madrid o el Athletic de Bilbao, pero estamos encantados de cualquier forma. ¡Es un equipo de tres categorías más!», explica Jesús López Berzosa 'Arteche', el técnico del Vimenor. Y el tercero de los mosqueteros que afila la espada es Sergio 'Sesi' Fernández, el técnico de la Gimnástica, para quien será su primera eliminatoria copera como entrenador, no así la de su equipo, que cumplirá su cuarenta y un participaciones en la competición. «Para mí es un premio por encima de todo. Y quiero vivirlo con lo pies en el suelo».

Los tres tienen un historia que compartir. En Vioño andan encajando como pueden las gradas supletorias en el campo y vendiendo a prisa las entradas para que no se quede nadie del pueblo sin ver el partido, mientras que en La Maruca van a tener que madrugar mañana para que entren a instalar las televisiones las cámaras con las primeras luces del alba. El Malecón lo tiene todo de serie. Nervios, prisas, dudas, temores... Ahora bien, además de toda esa vorágine que se monta alrededor de un evento así hay un partido de fútbol. O mejor tres. «Queremos hacerlo bien y pelear hasta el final por dar la sorpresa», adelanta Carlos Cruz, el míster del Velarde que añade que«en lo único que podemos ganar es en ilusión porque en lo demás no podemos obviar que existe una distancia abismal». Al menos, eso dicen los presupuestos, la estructura y tantas y tantas cosas. Pero en el fútbol «si el partido se hace largo y ellos no marcan... Lo mismo se les puede dar un susto».

El Sevilla es el transatlántico. Un rival con títulos europeos y una historia que asusta, con muchos ceros en las cuentas y, además, con una necesidad extra de ganar porque llega casi tocando fondo. «Tenemos que procurar que no nos encierren e intentar dar pases para respirar y dar pausa para alargar el máximo tiempo posible la posesión», explica el técnico del Velarde. El 'prao' de La Maruca está como una alfombra. Desde Sevilla andaban preocupados por el terreno de juego y han vuelto loco a los miembros del club para que les mandasen fotos. Por el Nervión tampoco deben estar muy tranquilos.

En la capital de Principado de Asturias también saben lo que es viajar por Europa, pero esta vez apenas tendrán que desplazarse hora y media por carretera para llegar a Torrelavega:«Va a venir mucha gente. Queríamos alejarnos un poco de todo, pero ya se han vendido más de 2.000 entradas. Va a ser una fiesta», dice Sesi. En la ribera del Besaya andan como locos por disfrutar de partidos así. Va con el ADN gimnástico. Y por soñar. «Espero a un Oviedo que va a venir a imponer su ritmo y estilo, pero nosotros tenemos que aprovechar nuestra fortaleza y que se vean lo menos posible las debilidades», advierte el técnico.

La Gimnástica tiene tantos años de servicio como el club carbayón, comparten el título de 'real' y se han visto las caras en muchas ocasiones así que algún abuelo de Tribuna seguro que sufrirá un 'deja vú', como dicen los franceses. «Con el formato este de la Copa, al jugar a un partido único todo es posible. Es inevitable soñar», añade Sesi, quien asegura que «los favoritos son ellos», pero que siempre se puede pensar en ir más allá. «Es como una final. Los jugadores van a estar motivados. Esperamos que esa tensión y nerviosismo no se lleve de mala manera», concluye.

En Torrelavega, salvo un par de jugadores que compatibilizan como pueden sus profesiones con el balón, la plantilla piensa en fútbol las 24 horas del día. Los pupilos de Sesi tienen ya horas de vuelo y algunos de ellos saben lo que es jugar este tipo de partidos. Sin embargo, en el Vimenor andan con el corazón en la mano desde que saben que el Mirandés visita Vioño. Mientras andan cumpliendo con el protocolo y con las peticiones de entradas y favores se preocupan por cómo meterle mano a los burgaleses. «Es un equipo joven y con muchos jugadores de filiales de clubes de Primera, así que su fútbol es vistoso», admite Arteche. Pero el míster sabe que una como esta «es probable que no se vuelva a ver». Por eso, toma aire, y sin que suene a exceso de gallardía se arranca. «Jugamos en casa y saldremos a ganar.Es una eliminatoria a partido único y en nuestro campo». Toma esa. Y además, no duda en asegurar que la motivación se escapa del vestuario: «Somos ambiciosos y competitivos y saldremos a por todas, aunque somos realistas y sabemos que tenemos pocas posibilidades». No se puede decir más alto ni más claro.

Arteche, el primo del inolvidable defensa del Racing y del Atlético de Madrid –de ahí que le llamen así–, está cansado de escuchar que todos los años «hay una sorpresa en la Copa. Nunca hemos dejado de soñar y por eso estamos aquí. Es muy difícil, pero ¿Por qué no?», insiste el entrenador del Vimenor, que tiene a la gente «enchufada y al cien por cien». El papel de los cántabros en este capítulo copero es de 'víctimas'. Sería un fracaso casi sin precedentes que el Sevilla mordiera el polvo en La Maruca. Los de Muriedas doblan aún más el reto por aquello de que su rival sería, en condiciones normales, un favorito no solo para la eliminatoria, sino para ganar la competición. «Hay que pellizcarse para seguir creyéndose esto, pero lo que tenemos que hacer es disfrutarlo hasta el final y hacerlo lo mejor posible. A nosotros con eso nos vale», afirma Cruz. Sampaoli y compañía lo tendrán crudo si salen de La Maruca arrastrando los pies.

Pero así como en la eliminatoria de Muriedas cuesta encontrar quien no apueste por los andaluces, en la de Vioño y Torrelavega no es extraño que haya quien sueñe despierto. «Sobre el papel, lo normal es que el Oviedo vaya a seguir adelante, que se clasifique. No voy a ponerme a decir las diferencias que hay porque son de sobra conocidas. Eso sí, ya adelanto que en ilusión e intensidad no nos van a ganar y eso en el fútbol...». En el banquillo de los carbayones llegan dos 'paisanucos', Álvaro Cervera, que aunque nació en Guinea Ecuatorial es cántabro de adopción, y Adolfo Mayordomo. «Son mis amigos y los conozco y puedo imaginarme cómo encararán el partido», explica Sesi. Sea como fuere, lo que es innegable es que «la Gimnástica estará arropada por su gente, como el Vimenor y el Velarde». De eso no hay duda.

«No hay que descartar el campanazo», insiste Arteche, que no se arruga. El míster del Vimenor apacigua sus ánimos y asegura que «pase lo que pase será un partido que se recordará muchos años. Lo de mañana será histórico y por eso lo que estamos intentando es controlar los nervios».

Casi todas las fiestas empiezan por una copa. Luego otra, luego otra... Y así hasta que apagan la música. En esta primera ronda al Vimenor, Velarde y Gimnástica no les toca pagar. Es más, van a salir ganando pase lo que pase. Así que lo mismo da la música que suene que nadie va a dejar de bailar y bailar.

Los tres equipos de casa, Velarde, Vimenor y Gimnástica entrenan hoy por la mañana. Será la última sesión antes de que comience su participación en la Copa del Rey, para los dos últimos además histórica. No han cambiado ninguna rutina y han mantenido el mismo plan semanal que durante la competición doméstica. Hoy será también el ensayo general de los tres sobre el escenario del partido, ya que ya se han completado las labores de acondicionamiento de los tres campos. En Vioño, La Vidriera, ya lucen las gradas supletorias que darán capacidad para los 2.300 espectadores que se calcula presenciarán el duelo con el Mirandés (12.00 horas). Falta acondicionar el bar y un tanto los aledaños. En La Maruca, por su parte, no hay problemas de espacio.

Se han habilitado las gradas portátiles, pero de haber hecho falta más capacidad tampoco habría habido ningún contratiempo. Se estima que serán cerca de 4.000 los aficionados que acudan a presenciar el partido contra el Sevilla (16.00 horas). Desde la capital hispalense se desplazarán cerca de 25 seguidores que ya compraron su entrada. El Sevilla llega hoy a Santander procedente de la capital andaluza y hará noche en un hotel de Santander.

El Mirandés y el Oviedo viajarán mañana, dada la proximidad de ambas localidades, apenas dos horas y media y noventa minutos, respectivamente. Lo mismo harán sus aficionados. Se esperan más de 200 hinchas del equipo burgalés y alrededor de 700 carbayones. La fiesta está asegurada.

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