Primera sanción en Cantabria a un 'hombre pájaro' por hacer salto base desde la estación superior de Fuente Dé

«Llevaban un tiempo detrás de estas personas y al final les cogieron», apunta Ángel Serdio, subdirector de Medio Natural, que insiste en que eran plenamente conscientes de que lo que hacían iba en contra de la normativa. En concreto, el principal implicado tendrá que pagar entre 500 y 5.000 euros por infringir la Ley de Conservación de la Naturaleza. Aunque no era la primera vez que lo hacía, nunca antes había sido sancionado, así que la cuantía de la multa se quedará en el rango inferior: 500 euros.

Los hechos ocurrieron en enero del año pasado. «Sé que venían por aquí dos chavales a hacer salto base, pero no tenían permiso. No lo tenían porque no han dado ninguno por el riesgo que tiene este deporte. Muchos de los que lo practican no llegan a jubilarse», apunta Óscar Casares, alcalde de Camaleño, donde ocurrieron los hechos. Más concretamente en Espinama, el pueblo en el que se encuentra el cable de Fuente Dé.

Lo que ocurre es que, como apunta Serdio, no está permitido sobrevolar Picos, con o sin motor, entre los 0 y los 3.000 metros sobre el nivel del suelo. Se podría con un permiso, pero debido a las difíciles condiciones del terreno y a la gran presencia de personas, hasta el momento las solicitudes siempre han recibido respuesta negativa. Medio Natural entiende que el lugar reúne las mejores condiciones para este tipo de deportes extremos, pero «hay que preservar unos valores».

Hay prácticas de este tipo, aunque como apunta Antonio Marcano, responsable de la instalación de Cantur, no son habituales: «Vienen, pero de forma esporádica». Sobre todo porque se trata de un espacio en el que hay presencia constante de personal de la instalación turística y el riesgo de ser detectados es muy alto. Lo que ocurre es que los saltos se producen en cuestión de pocos minutos. Cuando los agentes o la Guardia Civil reciben el aviso o se percatan, el infractor ya tiene todo el material guardado y se está alejando en su coche.

Esta es la primera vez que uno de ellos ha sido 'cazado'. El tal Bruno A. P. habría pasado desapercibido si al abrir la puerta al cartero hubiera recogido la notificación de la sanción. Como no lo hizo, su 'hazaña' ha quedado inmortalizada en el Boletín Oficial del Estado. En el pasado, el Gobierno de Cantabria también intentó multar a personas que hicieron más discretamente algo parecido y colgaron su vuelo en las redes sociales, pero las complicaciones legales lo impidieron.

Bruno se habría ahorrado los 500 euros si hubiera elegido otro de los lugares frecuentados por los deportistas locales para el salto base. Como explica Carlos González, aficionado y conocedor de la zona, es común y totalmente legal hacerlo desde el Cueto Agero hacia Lebeña, donde hay una zona poco menos que habilitada para ello. Y lo mismo ocurre en San Glorio, La Viorna o Peña Sagra en el caso del parapente.