El Ayuntamiento acusa a Ascán de obstruir el traspaso del servicio de basuras a Cespa

La comunicación se ha intentado forzar de todas las maneras. El Ayuntamiento ha enviado correos electrónicos, ha llamado, ha mandado notificaciones a través de la sede electrónica, ha enviado a la Policía Local con notificaciones en mano y ha tratado de revisar la maquinaria a través de la empresa de control. Todo porque necesitan revisar el material para conocer su estado antes del inicio del contrato con Cespa. Además, requieren una lista de personal actualizada para saber con exactitud cuántos empleados van a ser subrogados. Y el tiempo se echa encima, ya que el 11 de noviembre terminará el contrato con Ascán y al día siguiente lo asumirá Cespa.

La concejala de Medio Ambiente, Margarita Rojo, detalla que Ascán no ha abierto ninguna de las notificaciones realizadas a través de la plataforma electrónica como tampoco ha recogido las efectuadas personalmente por la Policía Local. Tras la declaración de la rescisión del contrato con esta empresa y el acuerdo de emergencia con la nueva, el Consistorio requiere información «que no están facilitando». La documentación que exige es necesaria para la recepción de la maquinaria del servicio, que deberá seguir utilizando la empresa que se haga cargo a partir de mediados de noviembre, así como toda la información sobre el personal a subrogar.

Además, Ascán-Geaser «no está permitiendo el acceso a sus instalaciones del personal de la empresa de control» para llevar a cabo la inspección de la maquinaria con antelación suficiente, con el objeto de comprobar el estado de la misma y garantizar una correcta prestación del servicio una vez resuelto el contrato. «No abren ni recogen las notificaciones, no contestan a los correos electrónicos, no cogen el teléfono, no acuden a las reuniones que se convocan, no permiten las inspecciones de la maquinaria a la empresa de control y tampoco entregan la documentación necesaria para recepcionar la maquinaria y subrogar al personal del servicio», lamenta Rojo.

Como explican desde el Ayuntamiento, la comunicación con la empresa se ha desarrollado casi siempre a través del correo electrónico. Y así se trató de continuar tras anunciarse la rescisión del contrato. La semana del 11 de octubre, tras aprobarse en la Junta de Gobierno Local la decisión de iniciar un acuerdo de emergencia con Cespa, desde Medio Ambiente comienzan a organizar el traspaso de las funciones de una empresa a otra.

El día 14 por la mañana, desde el Consistorio piden por correo electrónico la documentación necesaria para el traspaso y solicitan una cita con la dirección de Ascán al día siguiente, viernes, para organizar la transferencia del servicio con antelación. «No hubo respuesta. Llamamos por teléfono e incluso mandamos mensajes por WhatsApp, pero nada», señalan fuentes municipales. Esa misma noche, la empresa respondió al correo electrónico para comunicar que sólo atenderían a las notificaciones que se hicieran a través de la sede electrónica.

El día 15 se solicitó la documentación a través de dicha plataforma y se pidió una reunión para tratar el asunto. No hubo contestación y el día 19 volvió a insistirse a través de la sede electrónica. «Se adjuntó la resolución del contrato y de la emergencia, se pidió información del personal y de la maquinaria y se avisó de que la empresa de control iría el día siguiente a la sede». Ascán no leyó el aviso, así que cuando llegaron los empleados de la empresa de control no contaban con ello. «Les dijeron que sólo atenderían los avisos de la sede, pero es que se envían y no los abren».

El día 21 se repite la operación. El Ayuntamiento pide información y una reunión a través de la sede. «No asisten a las reuniones aunque tienen una dedicación del 100%, por lo que tienen la obligación de acudir y no hacerlo es una falta grave». Para cerciorarse de que les llegase la información, el Ayuntamiento envía a la Policía Local con una copia de la notificación. «Una vez más, dicen que sólo atienden a la sede electrónica pero siguen sin abrir los avisos». Al día siguiente, la empresa de control vuelve y se le impide el paso de nuevo.

Todo esto evidencia, considera Rojo, «la obstrucción permanente» para que se puedan llevar a cabo los trámites necesarios para la correcta prestación del servicio a partir de la salida de Ascán. Sin embargo, la edil recalca que desde el Ayuntamiento «se continuarán dando pasos firmes para conseguir que la ciudad recupere los estándares de calidad de limpieza que le caracterizaban hace años». Todas estas trabas, además, podrán ponerse en contra de la empresa. Según apuntan desde el Consistorio, «los daños y perjuicios se verán agravados si continúan con esta obstrucción y en su negativa de cumplir sus obligaciones».

1.

2.

3.

4.

5.

6.

7.