PASO A PASO
1. Se hierven 20 minutos los ingredientes del caldo en una olla. Se cuela y se reserva. Se pican las cebolletas y pimientos del sofrito y se echan en una olla amplia y baja con una pizca de aceite al fuego.
Se da un meneo y se incorporan los ajos y un pellizco de sal. Mientras se sofríe, se prepara el rape en medallones, cortando la cola. Cuando los tengamos, se sazonan y colocan en una bandeja. El sofrito estará dorado, así que añadimos la harina y le damos unas vueltas.
2. Se añaden las patatas en rodajas y se remueven, evitando que se monten unas sobre otras. Se añade el vino blanco, se deja evaporar y se vierte el caldo de pescado hasta cubrirlo. Se sazona y guisa a fuego muy suave 25 minutos o hasta que las patatas estén tiernas y la salsa, ligada.
3. Acabado: se pica el perejil. Se pasan los medallones de rape ligeramente por harina y luego por huevo batido. Se sumergen en aceite caliente en una sartén a fuego medio.
4. Se doran sin secarlos y se escurren en papel absorbente. Con todo el rape ya rebozado, se coloca sobre las patatas guisadas y se espolvorea el perejil.
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Para empezar con la receta de patatas en salsa verde con rape rebozado, se echan todos los ingredientes del caldo en una olla y se hierven durante 20 minutos. Se cuela y se reserva.
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Se añaden las patatas y se remueven, evitando que se monten unas sobre otras. Se agrega el vino blanco, se deja evaporar y se vierte el caldo.
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Se pasan los medallones de rape ligeramente por harina y luego por huevo batido. Después se sumergen en aceite bien caliente.
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Se doran los medallones sin secarlos y se escurren en papel absorbente. Con todo el rape ya rebozado, se coloca sobre las patatas guisadas.
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¡Y listo! Ya tenemos la receta de patatas en salsa verde con rape rebozado terminada.
Truco
Si añadimos demasiado caldo para guisar las patatas y la salsa queda ligera, basta con romper alguna patata y menear la cazuela para que la fécula nos haga el trabajo de espesar el guiso.
El vino
Adaro 2015. El vino de pago y más personal de Pradorey nace en su nueva añada con una imagen renovada, homenaje a Javier Cremades de Adaro, fundador de la bodega. Moderno y elegante, muy intenso en nariz y con un agradable y sedoso paso por el paladar (20 euros). J. L. Recio