Incertidumbre entre las familias afectadas por el cambio en los comedores escolares

El consejero de Educación, Sergio Silva, explicó ayer sobre este asunto que «estamos ultimando toda la parte administrativa para intentar que no haya ningún afectado, y me estoy refiriendo al personal incluso de los comedores. Hemos reaccionado en un tiempo récord a un desafío que era importante y preocupante».

Los padres de los alumnos asumen el cambio con resignación. Y con la incertidumbre que lleva consigo cualquier modificación inesperada. «No nos gusta lo que ha pasado. Para todo se necesita una rutina y que ahora, a mitad de curso, pase esto es un trasiego y una incertidumbre para los padres, que no sabemos qué es lo que va a pasar», explica Inés Oceja, presidenta de la Asociación de Madres y Padres de Alumnos (AMPA) del CEIP El Mimbral de Renedo de Piélagos. Dice, sin embargo, que «aunque hemos vivido momentos de incertidumbre, el centro nos transmite tranquilidad porque su Dirección es muy responsable y vela por el bienestar de los niños».

«Creo que va a ir todo bien», opina por su parte Eila Gómez, presidenta de la AMPA del CEIP Dionisio García Barredo de Santander. «Nosotros no hemos notado ningún cambio -continúa-. Solo estamos preocupadas por las trabajadoras que llevan meses sin cobrar y continúan atendiendo a nuestros hijos igual».

Itxaso Pérez, representante de la AMPA del CEIP Alto Ebro de Reinosa, añade que, «por lo menos, se ha encontrado una solución al problema y a nivel de usuarios no ha pasado nada. Lo principal es que los niños en ningún momento han notado nada y han comido bien cada día».