Tiempo de preparación 20 minutos
Ingredientes para 4 personas
- 500 g de pasta (preferiblemente, minimacarrones)
- 125 g de jamón ibérico cortado en dados de unos 5 mm de espesor
- 200 g de queso emmental rallado
- 120 g de champiñón cortado en dados de 5 mm
- 1 pastilla de caldo de ave
- 50 g de mantequilla
- 1 cucharada sopera de cebollino picado y unos tallos más para adornar el plato
- 1 cucharadita generosa de café de queso mascarpone
- Agua, sal y pimienta
PASO A PASO
Se funden los 50 g de mantequilla en una cazuela amplia, se agregan los minimacarrones y se saltean durante un minuto a fuego medio, como si se tratara de un arroz.
Se añaden los champiñones cortados en dados de unos cinco milímetros de lado y se deja sudar todo junto durante otro minuto más a fuego medio. Se vierte agua en la cazuela hasta que los macarrones queden cubiertos y se añade a la preparación un trocito de pastilla de caldo (si tenemos un buen caldo de ave elaborado en casa, siempre es más conveniente utilizarlo en vez de emplear el agua y la pastilla de caldo). Se deja que la pasta cueza durante diez minutos o hasta que esté cocida (el tiempo de cocción suele venir indicado en el envoltorio de la pasta) y se haya evaporado el agua
Se agregan a la cazuela en la que ya no deberá quedar nada del líquido de la cocción los dados de jamón, el queso emmental rallado y una cucharadita de café generosa de queso mascarpone. Se mezcla todo bien hasta que los quesos se hayan fundido perfectamente y todos los sabores se hayan integrado con la pasta.
Se rectifica de sal y pimienta, se espolvorea una buena cantidad de cebollino picado por encima y se pasa a una fuente de servir. Se adorna la pasta con jamón y champiñones con unos tallos de cebollino y se saca enseguida a la mesa para que el plato conserve la temperatura ideal.
1
Se funde la mantequilla en una cazuela y se saltea la pasta durante un minuto
2
Se añade el champiñón, se deja sudar un minuto y se cubre con agua o caldo.
3
Se cuece la pasta y se añaden el jamón y los dos tipos de queso.
4
Se decora con una ración generosa de cebollino picado y se sirve bien caliente.
5
Y listo!
TRUCOS
Para asegurarnos de que no nos pasamos con el punto de la pasta, lo mejor es dejar de cocerla cuando todavía esté un poco dura en el centro. Seguirá ablandándose mientras se añade la salsa y se sirve.