Óscar Freire: «Con Dora he creado un vínculo que nunca llegué a imaginarme»

-¿Quién es Dora?

-Para mí es un símbolo de cariño familiar.

-¿Qué representa?

-La fidelidad máxima escrita con mayúsculas.

-Usted no había tenido animales antes, ¿verdad?

-Bueno, de crío tuve un pajarito que, el pobre, se cayó al suelo con jaula y todo desde un cuarto piso.

-Vaya por Dios.

-No, no... ¡Sobrevivió!

-¿Qué ha aprendido de la experiencia?

-Pues he comprobado en primera persona lo que significa, tanto para mí como para él, tener un perro en la familia. Se crea un vínculo que nunca llegué a imaginarme.

-¿Y de Dora en particular?

-Ella nos aporta muchas cosas, pero, por encima de todas, yo destacaría su obediencia, su conformismo y la capacidad que tiene para no enfadarse por nada y con nadie.

-Es una raza de carácter dócil y amable, sí.

-Es muy tranquila.

-Mire si son dóciles y amables que en lugar de echar a un ladrón le ayudarían a sacar las cosas de la casa.

-Jajaja. Efectivamente, es así.

Yo jamás le he visto a Dora tener un mal gesto con nadie. Siempre hemos dicho que está «humanizada».

-Que sea un Golden y se llame Dora ¿es porque quería cubrirse de oro... más todavía?

-A Dora nos la regalaron cuando tenía más o menos un año, de modo que es casualidad, aunque, ahora que lo dice, me gusta que lo haya interpretado de esa manera.

-Usted ganó tres ediciones de la clásica Milán-San Remo, ¿es correcto?

-Sí, eso es. La gané tres veces. Y también tengo tres Mundiales y tres hijos... Pero con un perro me basta.

-¿Recuerda que en la tercera le adelantara un perro?

-No, no lo recuerdo.

-Igual Internet le refresca la memoria.

-Pero no hubiera contado como ganador, ¿no?

-De acuerdo a sus aptitudes, ¿Dora es una perra rodadora, escaladora o velocista como su dueño?

-¡Qué va! ¡Si acaso masajista!

-No le va el ciclismo.

-No.

-¿Usted sabe por qué los perros le tienen tanta tirria a los ciclistas?

-Pues, la verdad, no, no lo sé. Supongo que será por diversión, unas veces, por defender el territorio, otras, o, incluso, por desconocimiento o falta de socialización.

-Cuando saca la bicicleta, ¿se lleva a Dora?

-No, a Dora la llevamos al monte o a la playa, porque le encanta correr cuando los niños le tiran la pelota, revolcarse en la arena y jugar con las olas.

-¿Ha oído hablar del bikejoring? Es lo mismo que el tiro de trineo pero con bicis.

-Sí, pero yo no lo haría.

-¿Y lo que iba a presumir Dora tirando del campeón mundial?

-Pues mire, tengo mis dudas, porque Dora tiene ya ocho años y los años... nos pesan a todos.